Los hackers accedieron a nombres, apellidos, números de DNI y formas de contacto, aunque los datos bancarios no fueron vulnerados; los afectados se hallan repartido por toda España, incluida Asturias
Hubo un tiempo en que los enemigos eran físicamente identificables, visibles y, por tanto, relativamente fáciles de combatir. Ahora, en cambio, muchas de las amenazas que se ciernen sobre Gobiernos, empresas y sociedades son invisibles, intocables, nacidas y desarrolladas en el infinito e intangible mundo de lo digital. Iberdrola acaba de comprobarlo. La compañía energética vasca sufría a principios de este mes un ciberataque que afectaba a datos de unos 850.000 de sus clientes en España. Los hackers obtuvieron nombres, apellidos, números de DNI y formas de contacto; no obstante, no se accedió a datos bancario.
Fue el 7 de mayo cuando la empresa detectó un acceso no autorizado a las bases de datos de clientes, ocasionado a través de un proveedor Los afectados serían un total de 600.000 de Iberdrola Clientes, y otros 250.000 de Curenergía, su comercializador de último recurso que opera en el mercado regulado. La propia Iberdrola ha indicado que ha puesto «de forma inmediata» este hecho en conocimiento de la Agencia de Protección y Datos, y que ha cursado la pertinente denuncia ante las Fuerzas y Cuerpos de Seguridad del Estado. A la vez, ha remitido una comunicación a los clientes afectados informándoles del incidente.
Un problema extendido
Del mismo modo, la energética afirmó que, ante la ola de hackeos sin precedentes, que han afectado a importantes empresas y entidades públicas y privadas en los últimos tiempos, «trabaja de forma continua para combatir estos ciberataques actuando siempre con total transparencia y colaborando con los organismos reguladores y supervisores». A este respecto, sus responsables han asegurado que la seguridad es «una prioridad» para la compañía, «tal y como se demuestra la continua y creciente dotación de recursos humanos y económicos». Más aún, detallan que «en los últimos años la inversión se ha visto robustecida con una financiación que se ha incrementado notablemente»; hoy son más de cuatrocientos los profesionales dedicados a dicho campo.
Este mismo martes se conoció que Telefónica estaba «investigando la legitimidad de la información» que un usuario y potencial ciberdelincuente había publicado en un foro de hackers en internet en el que afirma haber conseguido los datos de 120.000 usuarios y empleados de la compañía española, los cuales habría puesto a la venta. Así mismo, hace unas semanas el Grupo Santander informó de un «acceso no autorizado» a una base de datos de la entidad financiera alojada en un proveedor que afectó a clientes de España, Chile y Uruguay, así como a todos los empleados y a algunos exempleados del grupo.