En ocasiones, detrás de un anuncio rutinario en el Boletín Oficial del Principado de Asturias (BOPA), se encuentra un hecho trascendente. La primera publicación de hoy es el cese de Lydia Espina como Directora General de Planificación e Infraestructuras Educativas. El anuncio es el paso previo, y necesario desde el ámbito legal, para su nombramiento como consejera de Educación, en sustitución de Carmen Suárez, apartada del cargo tras una sucesión de polémicas en distintos frentes educativos durante los dos últimos años. De hecho, la última decisión que emana de su mandato, la planificación del nuevo curso escolar 2021/22 en situación de pandemia, ha enfadado a docentes y sindicatos al prescindir del refuerzo de docentes contratado para el curso pasado.
La nueva consejera de Educación dirigió el Colegio Montevil
Lydia Espina (Villaviciosa, 1974) ha ejercido como maestra de Infantil y Primaria y como profesora de Inglés en diversos centros educativos asturianos y desde julio de 2019 dirigía el Colegio Público Montevil, de Gijón. Este fue su último trabajo fuera de la política, que dejó para hacerse cargo de la Concejalía de Educación, Cultura y Deporte de su concejo natal. Compaginaba este cargo público con responsabilidades de partido, como responsable de la Secretaría de Administración en la ejecutiva local de la Agrupación Socialista de Villaviciosa.
El pasado mes de febrero Espina sustituyó al frente de Planificación e Infraestructuras Educativas a Cristina Vega, que dejó el cargo por razones de salud. Solo habían pasado dos meses desde que accedió al cargo en sustitución de Ana Isabel López Isla, que había presentado previamente su dimisión.
Lydia Espina López es funcionaria de carrera del cuerpo de maestros desde 2016. Licenciada en Filología Inglesa por la Universidad de Salamanca, posteriormente obtuvo el grado de maestra en Educación Primaria. Ahora tiene por delante los dos últimos años del mandato para asumir la planificación educativa en Asturias.
El primer cambio en la cartera del Gobierno de Barbón
El nombramiento de Lydia Espina es el primer cambio que aborda en su cartera de consejeros el presidente Adrián Barbón. De momento, los docentes han aplaudido un cambio, que consideran que debería haberse hecho antes. El cambio llega en pleno verano y el Presidente lo ha justificado como «necesario para conseguir una mayor conexión entre la formación y el empleo para responder a la demanda de un mercado laboral en profunda transformación”.
Por Marta Pérez
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