La Consejería de Salud prevé adelantar a diez semanas la aplicación de la segunda dosis de AstraZeneca a las personas de entre 60 y 69 años, pauta que actualmente está fijada en 12 semanas. Así lo ha avanzado el director general de Salud Pública del Gobierno asturiano, Rafael Cofiño, quien ha señalado que el ritmo de vacunación en Asturias avanza «bien«, con el 72% de la población mayor de 16 años con al menos una dosis.
Cofiño ha comparecido en rueda de prensa junto al jefe del servicio de vigilancia epidemiológica, Ismael Huerta, y la coordinadora de los programas Covid, María José Villanueva, para ofrecer datos actualizados de la situación epidemiológica.
En cuanto a la vacunación del colectivo de entre 60 y 69 años, el director de Salud Pública ha explicado que son los que más están tardando en recibir la segunda dosis debido a que se les aplicó AstraZeneca y este suero tiene un intervalo más elevado entre las dos aplicaciones que otras fórmulas. Contando ahora con una mayor disponibilidad de viales, Salud quiere adelantar la vacunación a partir de esta semana, ya que las dos dosis ofrecen una mayor protección contra variantes como la Delta, originaria de la India y presente ya en Asturias con siete casos.
Esta variante «está empezando a circular» en Asturias, aunque desde Salud no esperan que se difunda de manera «explosiva«. Al contrario, esperan que ocurra como con la variante Gamma, originaria de Brasil, que lleva circulando tres meses por Asturias y acumula 80 casos.
Ismael Huerta ha justificado el adelanto en la vacunación señalando a unos informes británicos que muestran que la variante Delta tiene una mayor capacidad de transmisión, pero «tampoco es explosiva», y evidencian que la protección con una sola dosis frente a esta variante es mucho más baja que con las dos. No se plantean adelantarla más porque «perdería eficacia», según Huerta.
Respecto a la vacunación del resto de colectivos, ha agregado, el planteamiento es seguir vacunando por cohortes de edad en orden descendente. Por «cuestiones operativas», como la mayor disponibilidad de dosis, se podrían llegar a solapar colectivos de distintas edades en los mismos días. No obstante, con la previsión de llegada de sueros en julio y agosto, menor que la recibida en junio, Huerta no tiene claro que se pueda dar «una vacunación muy masiva».
Vacunación para quienes han pasado la enfermedad
Ha agregado el jefe del servicio de vigilancia epidemiológica que la vacunación de los escolares no se planteará hasta que se vea cómo está la situación «a finales de agosto».
Por otro lado, en cuanto a las personas que han pasado la enfermedad, Huerta ha explicado que la pauta habitual es administrar una sola dosis para los menores de 65 años, seis meses después de haber pasado la COVID-19. Se espera ese periodo, ha agregado, porque quienes tienen «mayor respuesta inmune» son los que han pasado la enfermedad y se han vacunado seis meses después.
Es distinto el caso de los mayores de 65 años, colectivo entre el que «hay más posibilidad» de que el sistema inmune no responda con la misma eficacia. En ese caso, la pauta es de dos dosis.
En cuanto a la situación de los afectados por el «covid persistente», la recomendación es vacunar a estas personas, ya que «en general» la administración de la vacuna les beneficia y ayuda a recuperarse.