La Comisión de Presidencia del Parlamento asturiano ha aprobado este martes una proposición no de ley de Podemos en la que se pide limitar el uso de las armas de electrochoque, como parte del armamento policial, de las fuerzas y cuerpos de seguridad bajo su competencia, usándolas sólo si existe una necesidad operativa real para evitar riesgo de tortura o penas inhumanas.
Así, la propuesta de Podemos, que contó con el apoyo de PSOE e IU y el voto en contra de PP, C’s y Vox, pide limitar su uso, al igual que ocurre con las armas de fuego, a aquellas situaciones en las que exista un riesgo para la vida o la integridad física del agente o de terceras personas, riesgo que no pueda contenerse por medios menos extremos y como último recurso, evitando los medios letales, como las armas de fuego. Se recoge que las armas de electrochoque no deberían utilizarse para el día a día de la actividad policial.
También reclama Podemos elaborar protocolos públicos para estas armas, garantizando que el personal policial que vaya a utilizarlas esté debidamente formado en su uso y garantizando que dichos protocolos cumplen con los estándares internacionales de derechos humanos; garantizar el establecimiento de mecanismos de rendición de cuentas, elaborando periódicamente informes públicos sobre los incidentes en los que hayan sido utilizadas las armas de electrochoque y garantizar el uso adecuado de este tipo de armamento.
Riesgo «considerable» de tortura
El diputado de Podemos, Rafael Palacios, ha sido el encargado de defender la propuesta en la que se pide prohibir el uso de estas armas en modo de contacto directo, pues el parlamentario de la formación morada ha indicado que la misma entraña considerable riesgo de tortura u otros tratos o penas crueles, inhumanas o degradantes.
Por ello se reclama además prohibir el uso de descargas reiteradas o prolongadas y que se prohíba su uso contra determinados colectivos: menores de edad, personas con alteraciones emocionales o incapacidad mental o física o personas bajo el efecto de las drogas. También se solicita coordinar el uso de las armas de electrochoque entre todas las Administraciones del Estado.
La propuesta ha sido apoyada por los grupos parlamentarios de PSOE y de IU. En este sentido la diputada socialista Lidia Fernández ha indicado que esta proposición ya ha sido presentada, debatida y aprobada en el Congreso de los Diputados, que es donde realmente compete tomar las decisiones referentes a los cuerpos y fuerzas de seguridad del Estado.
«Mi grupo parlamentario siempre estará a favor de la defensa de los derechos humanos y de la proporcionalidad y adecuación en el uso de la fuerza», ha dicho Fernández, que ha querido trasladar la «total confianza de su grupo en el trabajo diario de los agentes» y les ha agradecido la «enorme labor social que desempeñan».
Así ha insistido en que consideran que esta PNL supone una «mayor garantía» tanto para el trabajo y la labor de las fuerzas y cuerpos de seguridad como para los ciudadanos.
Un «mantra ideológico» para el PP
Para el PP esta proposición responde únicamente a un mantra ideológico que busca siempre poner en tela de juicio el trabajo de los miembros de las fuerzas y cuerpos de seguridad del Estado, según ha indicado el diputado Pablo Álvarez Pire.
«Le recuerdo que la realidad en España no tiene nada que ver con lo que ustedes reflejan en esta proposición», ha dicho Álvarez Pire, que ha defendido el trabajo diario de los agentes y ha pedido a Podemos que «no redacte sus propuestas después de ver una serie de Netflix o HBO».
El diputado de Ciudadanos, Sergio García, ha criticado la proposición de Podemos porque a su juicio distorsiona el trabajo que realizan los agentes de las fuerzas y cuerpos de seguridad que «siempre actúan en base a la proporcionalidad» y ha pedido a Podemos que «se quiten sus miedos ideológicos».
«Las fuerzas y cuerpos de seguridad del Estado no son los malos y en España no van pegando tiros por ahí a diestro y siniestro, no se qué películas ven ustedes», ha indicado Sergio García, que ha acusado a miembros de Podemos de «usar a los antidisturbios como sacos de boxeo». Esta cuestión ha despertado las críticas de Rafael Palacios que ha pedido al diputado de Ciudadanos que retirase dichas acusaciones, algo a lo que García no ha accedido.
«Ha habido incluso casos de muerte»
Desde IU, su portavoz Ángela Vallina ha indicado que estas armas no son nada banal y desde hace ya tiempo su uso ha estado sometido a la controversia por una posible mala utilización.
«Ha habido incluso casos en los que la muerte de alguna persona ha estado relacionado con el mal uso de estas armas», ha dicho Vallina, que ha mostrado el apoyo a la iniciativa y que ha añadido que «apoyar a las fuerzas y cuerpos de seguridad del Estado y estar a su lado es darles la total seguridad jurídica».
Desde Vox, el portavoz Ignacio Blanco, ha indicado que hay que empezar la casa por el tejado y desde su partido deberían empezar a controlar a sus integrantes que apedrean y patean a los agentes de las fuerzas y cuerpo de seguridad del Estado y no cuestionar el trabajo de las mismas.
«Primero deberían disciplinarse dentro de su partido y luego si quieren cuestionar a las fuerzas y cuerpos de seguridad, algo que nosotros nunca haremos. Siempre estaremos de su lado», ha dicho Blanco, que ha rechazado la propuesta de Podemos.