La nueva norma, la primera de este tipo en España, impedirá la venta de vivienda pública y refuerza un modelo que sitúa el derecho a la vivienda por encima del negocio y la especulación

El Gobierno del Principado de Asturias ha aprobado la nueva Ley de Vivienda, una norma de carácter pionero a nivel estatal al reconocer por primera vez la vivienda como un determinante de la salud. El texto fue avalado por el Consejo de Gobierno el pasado 11 de diciembre y supone un cambio de enfoque en las políticas públicas, al considerar el acceso a una vivienda digna no solo como un derecho social, sino como un factor clave para prevenir desigualdades y mejorar el bienestar de la ciudadanía. El consejero de Ordenación del Territorio, Urbanismo, Vivienda y Derechos Ciudadanos, Ovidio Zapico, destacaba este miércoles que la ley “refuerza el modelo asturiano, que sitúa a las personas en el centro”, frente a una concepción de la vivienda ligada al negocio y la especulación. En una comparecencia ante los medios, recordó que la inclusión de la vivienda como determinante de la salud es una innovación sin precedentes en España y que ya ha despertado el interés de otros legisladores autonómicos.
Entre los principales avances de la norma figura la prohibición expresa de vender vivienda pública, una medida con la que el Ejecutivo autonómico pretende poner fin a décadas de descapitalización del parque público. El consejero recordó que, cuando Asturias asumió las competencias en materia de vivienda a comienzos de los años ochenta, el Principado contaba con cerca de 31.000 viviendas públicas, una cifra que se redujo a 9.600 en 2023: “Esta ley frena esos procesos de pérdida mientras esté en vigor”.
La legislación también ordena todas las actuaciones públicas a través del Sistema Asturiano de Vivienda Protegida, define la vivienda como un derecho subjetivo con garantías y prestaciones asociadas, y establece una única tipología de vivienda protegida de régimen general, de carácter vitalicio, que no podrá incorporarse al mercado libre. En paralelo, Zapico avanzó los objetivos del Ejecutivo para lo que resta de legislatura, con la previsión de iniciar o promover unas 1.000 nuevas viviendas públicas, que se sumarán a las casi 600 ya en marcha, hasta alcanzar alrededor de 1.500. A más largo plazo, el Gobierno autonómico trabaja con un horizonte de planificación hasta 2035, con la meta de llegar a las 15.000 viviendas públicas en Asturias.