Desde El Musel lamentan la elección de la «vía de la confrontación» por parte del Consistorio; este último aprobaba ayer lunes el Plan Especial para el antiguo astillero Naval Gijón, incluido el requerimiento formal de la franja de terreno pendiente

Todo apunta a que el hacha de guerra desenterrada en la pugna entre la Autoridad Portuaria de Gijón y el Ayuntamiento de la ciudad tardará aún en volver a ser sepultada. Cumpliendo con la amenaza hecha a finales de la pasada semana, la Junta de Gobierno local aprobaba ayer lunes el expediente de contratación para la redacción del Plan Especial para ámbito del antiguo astillero Naval Gijón, y activaba en paralelo el requerimiento formal para que El Musel entregue la franja de terreno pendiente, de 3.848 metros, para que el proyecto ‘Naval Azul’ pueda convertirse en realidad. Un movimiento de ficha que no ha sentado nada bien en el Puerto, organismo que, ahora, dispone de un plazo de treinta días para consumar la cesión, antes de que el caso acabe directamente en los tribunales.
Por parte del Consistorio, el hecho de que, según el portavoz del Ejecutivo, Jesús Martínez Salvador, ya exista un interés empresarial firme en asentarse en esa futura área centrada en la ‘economía azul’ ha dado alas a la maniobra ejecutada ayer. «No vamos a dar ni un paso atrás, y vamos a impulsar todo lo que podamos su desarrollo«, sentenciaba el edil de Foro durante su comparecencia ante los medios, antes de cargar contra las acusaciones de «deslealtad» vertidas desde el Puerto la pasada semana. En ese sentido, Martínez Salvador aseveró que «la única deslealtad posible aquí es no cumplir los acuerdos que uno adopta (…), la que están sufriendo los gijoneses«, y recordó que la cesión ya se plasmó en el acuerdo firmado el 12 de diciembre, escritura pública mediante, detallando en los pliegos la cesión de una parcela, la ahora pendiente, y la venta de otra, operación esa última completada exitosamente a un precio de 4,7 millones de euros. Aun así, en el Ayuntamiento confirman que seguirán «negociando» para evitar llegar al extremo judicial.
Horas después de la comparecencia de Martínez Salvador, en El Musel elevaban la voz para lamentar que el Consistorio «haya elegido la vía del ultimátum sin ni tan siquiera sentarse a hablar de los acuerdos de cesión propuestos, tal como había acordado la última vez, el pasado 2 de mayo, con su portavoz de Gobierno, cuando se consensuó empezar a trabajar sobre una propuesta de convenio». Prudentes en sus declaraciones hasta que reciban el requerimiento formal del Ayuntamiento, los responsables de la Autoridad Portuaria sí han convocado para esta semana un encuentro con representantes vecinales de la Zona Oeste. El objetivo es trasladar a los citados su particular visión del problema, poniendo el foco en la «intransigencia» demostrada por el Ejecutivo local.