El presidente confirma que, si los Ayuntamientos lo reclaman, «habrá que habilitar jurídicamente las herramientas para que lo puedan cobrar voluntariamente», aunque recuerda que no es una cuestión que «esté en el pacto de Gobierno»
«Donde manda patrón, no lo hace marinero», sentencia un muy conocido dicho popular que, este jueves, tiene cierta dosis de sentido aplicado a la esfera política asturiana. Sólo veinticuatro horas después de que la vicepresidenta del Gobierno asturiano, Gimena Llamedo, reaccionase a la petición de Convocatoria por Asturias de reabrir el debate sobre la imposición de una tasa al turismo afirmando que dicha medida sólo se llevaría a término previa petición de los Ayuntamientos, su superior inmediato, Adrián Barbón, se ha pronunciado este jueves sobre el particular ampliando dicha declaración. Así, el presidente del Principado no ha quitado razón a su segunda al mando, aunque sí ha dejado claro que, por el momento, «en la inmensa mayoría de Asturias no hay ningún tipo de problema en ese sentido».
Barbón ha aprovechado su intervención con motivo del 140º aniversario de la apertura de la rampa del Pajares al tráfico ferroviario para aclarar que, efectivamente, y en consonancia con lo dicho por Llamedo, «si los alcaldes quieren», será factible habilitar jurídicamente las herramientas para que los Consistorios asturianos que sufran una mayor tensión turística puedan puedan ese impuesto simbólico, bautizado ‘ecotasa’ por el diputado de Convocatoria Xabel Vegas, y que, eso sí, se aplicaría «voluntariamente», a discreción de los regidores. Ahora bien, el máximo representante de los asturianos también ha sido claro al precisar que semejante medida «no forma parte del pacto de Gobierno», y ha subrayado que el PSOE, como partido al frente del Ejecutivo autonómico, «no está de acuerdo con una tasa de imposición autonómica, porque la situación no es la misma en todos los concejos».
