El líder autonómico también ha descartado que la ex Miss Asturias y ex empleada de LogiRAIL le hiciese llegar información sobre caso de corrupción alguno, tras saberse que los tres correos enviados por ella fueron tramitados por el gabinete de Presidencia

No ha sido la comparecencia pública reclamada por el grueso de las fuerzas políticas en la oposición pero, al menos, ayer martes el presidente del Principado, Adrián Barbón, sí se pronunció directamente sobre el señalamiento a su persona hecho un día antes en el Senado por Claudia Montes, ex Miss Asturias, ex empleada de LogiRAIL y, en apariencia, una de las piezas clave de ese puzle que es el ‘caso Koldo‘. En una rueda de prensa concedida al término de Comisión Ejecutiva Autonómica de la Federación Socialista Asturiana (FSA), el líder regional descartó de todo punto conocer a Montes, y mucho menos tener alguna clase de amistad con ella, tal como la aludida llegó a afirmar en sede parlamentaria. Del mismo modo, Barbón negó que la citada Montes le remitiese información sobre caso de corrupción alguno, y recordó que, como ya publicase este diario ayer, fue su gabinete el que gestionó los tres correos electrónico remitidos por Montes, sin que se encontrasen en ellos elementos que justificasen ponerlos en conocimiento del Ministerio Fiscal.
«Si algo tengo, y creo que los que me conocen lo saben bien, es que la corrupción es algo que me asquea, y con lo que mi tolerancia es absolutamente cero«, sentenció el líder autonómico. Y es que, siempre a tenor de sus declaraciones de ayer, Montes, en efecto, envió hasta tres correos, pero ninguno superó el filtro del gabinete de Presidencia, por lo que no llegaron a manos de Barbón. Y es que, de esas comunicaciones, la primera versaba sobre un supuesto caso de acoso escolar sufrido por uno de los hijos de Montes, mientras que la tercera recogía una petición de concesión de una ayuda para el alquiler, alegando sutilmente «un trato de favor por ser militante del PSOE«. Por descarte, fue el segundo de los tres correos en el que su autora se refería a «alguna situación relativa a alguna empresa, sin citarla, en la que había hechos judicializados o bajo investigación«, cuestiones todas de las que afirmaba tener conocimiento. El gabinete no le respondió, al entender que semejante información, de ser cierta, debería ser elevada a Fiscalía.
Precisamente sobre ese último aspecto se pronunció ayer Barbón, insistiendo en que «lo que tiene que hacer una persona cuando tiene conocimiento de unos posibles delitos no es venir contárselo ni al presidente, ni al Gobierno de Asturias, ni al partido que sea; lo que tiene que hacer es ir directamente poner en conocimiento de la Fiscalía lo que sabe«. Del mismo modo, el líder autonómico reiteró que los procesos de contratación «pasan todos los filtros» en Asturias, una aseveración hecha con el fin de atajar las acusaciones de montes acerca de supuestos amaños. Y concluyó uniéndose a la estela traza en el Senado por el presidente Pedro Sánchez sobre los pagos en metálico, recordando que no están prohibidos y son legales siempre que se hagan «contra factura«.