BEATRIZ RICO
«No he sacado nada bueno del confinamiento y creo que la sociedad tampoco, ni salimos mejores ni más fuertes»
«Estamos como siempre: Nos sobra talento y nos falta presupuesto»
«Cuando comencé a hacer monólogos un buen amigo me dijo que no utilizase la palabra ‘polla’ ni tacos, porque a los chicos se les tolera pero a nosotras no»
«Me quedo con Cimavilla, que tengo recuerdos con amigos de folixa y pasándolo pipa»
Beatriz Rico, esta avilesina con ancla echada en Gijón que conocimos como azafata en El precio justo, arrasó en el programa infantil Telebuten y nos conquistó como actriz en series como UPA Dance, no deja de sorprendernos. Ha capitaneado proyectos musicales como “Rico and Roll” (su banda de rock) y ahora nos presenta su flamante estreno como escritora con “De Miss a más sin pasar por Albacete”. Hoy nos hace hueco entre función y función de las dos obras teatrales que está girando por la Península para hablarnos de su novela en clave cómica alabada por la crítica y el público.
Hace 13 años nos conocimos en el teatro de la Universidad Laboral en el estreno de la película “Cenizas del Cielo” de Jose Antonio Quirós. Desde entonces te hemos visto trabajar en cine, tv, teatro, música, y ahora en la publicación de tu primera novela. ¿Eres una emprendedora nata?
Podría decirse que sí, pero con poco mérito. La vida me va poniendo las cosas delante. Una vez intenté emprender en hostelería y me salió muy mal por lo que dejo que la vida me vaya marcando el camino y confío en mi intuición. Por ejemplo, lo del rock lo tenía como una asignatura pendiente y fue la banda de rock la que vino a mi y sólo tuve que decir sí. Con la novela fue lo mismo, mis amigos, seguidores, familia me decían: “Escribe”. Un día en confinamiento me dió por escribir para levantarme el ánimo. A las pocas semanas Planeta se puso en contacto conmigo para pedirme que escribiera en función a la repercusión de mis post en Instagram, y resulta que yo ya había escrito la novela. Emprendedora sí, pero teniendo claro donde me meto. A lo loco, ya no.
¿Qué opinas de la situación de la cultura a día de hoy? ¿Hay un cambio de paradigma?
Estamos como siempre, en el sentido de que nos sobra talento y nos falta presupuesto. Si le sumas una pandemia te encuentras con destrucción de puestos de trabajo, gente que lleva un año sin trabajar. Fuera del cine, teatro, música y conciertos que aún hay algo de movimiento, el sector está en coma. Los técnicos lo están pasando muy mal y nadie habla de ellos.
Tuve la suerte de poder entrevistarte en mi programa de entrevistas virtuales “De puertas pa’ dentro” durante el confinamiento domiciliario. ¿Cuál es tu balance post pandemia? ¿Hemos salido reforzados?
Para mi el balance es negativo. En confinamiento pasé miedo, tristeza, depresión. No he sacado nada bueno y creo que la sociedad tampoco, ni salimos mejores ni más fuertes. Si pensamos en todos los que se han ido, los círculos personales rotos, basta para decir que no hemos salido reforzados.
Pero centrémonos en el presente, “De Miss a más sin pasar por Albacete” ¿Qué te lleva a gestar la novela?
Siempre tuve el gusanillo de escribir pero soy muy perezosa y con mis post de las redes sociales me servía. Mi marido muchos días me ponía una libreta y un boli en mi escritorio a ver si conseguía que empezase a escribir en serio. Un día me puse a ello con mi estado de ánimo oscuro y sorprendentemente todo me salía de risa y cómico. A partir de ese día, poseída por la inspiración terminé el primer capítulo y comencé a obsesionarme con las tramas y personajes. Tenía claro que quería hacer humor y trasladar mensaje a los lectores.
El humor es el hilo conductor y leitmotiv de tu libro, ¿Necesitamos reir más?
Necesitamos reir más siempre. Nos reímos poco, veo muchas caras tristes, sobre todo aquí en Madrid, con el estrés de la gran ciudad, malos modos. Pienso: “Este necesita reírse más, y otra cosita que yo me sé, también”.
En la novela sale a relucir el término “mocatriz” (mezcla de modelo, cantante y actriz) que tan bien nos definieron los ‘Ojete Calor’ en su canción. ¿Te sientes identificada? ¿Por qué?
No me siento identificada. Lo escribí rompiendo una lanza por las chicas misses estigmatizadas que por ser guapas se cree q son tontas, que hacen un poco de todo pero que no se les da el valor real para casi nada. Al final del libro se descubre la incógnita y el sueño de Rita (la protagonista) que es una chica lista, culta y que sabe lo que quiere pero por ser miss ya no le dan oportunidades. Queda reducida al brilli-brilli y dar vuelta a las letras de los paneles en tv.
¿Es necesario que la mujeres nos empoderemos más? ¿Por qué cuesta tanto romper ciertos tabúes estéticos y sexuales?
Sí, es necesario. La brecha salarial ahora mismo está en el 23% entre hombres y mujeres que ostentan el mismo cargo. Por desgracia nos han educado en el patriarcado y aunque hemos hecho grandes avances aún nos queda mucho camino. Por ejemplo, a propósito de los tabúes, cuando comencé a hacer monólogos un buen amigo me dijo que no utilizase la palabra “polla” ni tacos, porque a los chicos se les tolera pero a nosotras no. Es cierto que en mi primer monólogo utilicé esas expresiones y algunos se removían en la butaca. Entiendo que el cambio tendrá q ser progresivo.
Hablado de estética, hace algunas semanas te viste envuelta en una polémica durante tu colaboración en “Pasapalabra”. Hay quién te criticó por tu aspecto físico afirmando que estabas gorda y se lió parda. ¿Qué está pasando?
Me sentó mal, porque yo pesó 52 kg. No me extraña que después muchas niñas tengan problemas y trastornos alimenticios con estos juicios estéticos. En “Pasapalabra” se lió porque unos decían que estaba guapa por el bisturí y otros que estaba muy mal, muy fea y muy vieja. Seguimos dando más importancia a la estética que a la ética. Qué forma de juzgar sin saber tiene la gente a través de la red y la impunidad y anonimato con que expresan sus opiniones. A las mujeres nos siguen midiendo por el físico y por la edad. Este es el machismo llevado al extremo, propio de una sociedad atrasada y cruel.
Y barriendo pa casa, tú que eres asturiana de pro y amante de nuestra tierrina. ¿Qué recuerdos guardas de Gijón?
Recuerdo sobre todo las tardes de los sábados con mi amiga Bea en la playa de San Lorenzo, en el momento que se pone a llover ¡y tienes que salir corriendo! Otras tardes en “El puentín” tomando unes botellines de sidra, recuerdos de los primeros amores…
Asturias es mi tierra, mi raíz, y estoy muy feliz y afortunada de ser asturiana.
¿Un lugar favorito playu?
Me quedo con Cimavilla, que tengo recuerdos con amigos de folixa y pasándolo pipa.
Una anécdota en Gijón.
Cuando estudiaba en el instituto Jovellanos hicimos una representación teatral en inglés. Yo la dirigía y hacía el papel de una señora despistada que iba al oculista. Cuando terminó la función vino la profe a abrazarme y me dijo que tenía claro que iba a ser actriz. Yo también lo tenía claro, jaja.
¿Qué es lo primero que harás cuando vengas?
Comer bien, la que yo llamo “comida de madre” por lo rica y buena que está, disfrutar del clima y el cielo encapotao, de mi gente, de la playa y salir corriendo si se pone a “orbayar”.
Comentarios 1