«Además de jugar en el Somió, en el Sporting y en el Athletic de Bilbao, disputó cinco temporadas en el equipo rojiblanco madrileño (…); en la última, la de 1915, alternó su presencia en la alineación ‘colchonera’ con la ‘merengue’ sin problema»
El Sporting vuelve a la carga en el trofeo copero, que tan buenos recuerdos trae a los aficionados sportinguistas, pese a que las dos finales disputadas por el club rojiblanco se saldaran con sendas derrotas. Pero bueno es recordar al primer sportinguista que logró imponerse en el trofeo copero. La Copa del año 1911 fue conseguida por el Athletic Club de Bilbao, con la presencia de dos asturianos en su plantel: Celso Arango, natural de Cangas del Narcea, y Belaunde, aunque sólo este último disputó la final.
Luis Belaunde Prendes nació en Gijón el 4 de agosto de 1890. Su padre, era el banquero e industrial Luis Belaunde Costa, propietario del diario local El Noroeste, y el joven futbolista estaba emparentado con importantes familias del mundo cultural y político asturiano. Su tío, José Nava Caveda, que era, a su vez, sobrino del escritor José Caveda y Nava (curiosa coincidencia de nombre y apellidos), se casó con María Mercedes Prendes Busto, sobrina política del escritor Armando Palacio Valdés e hija del que fuera alcalde de Gijón durante diez años, Manuel Prendes Hevia.
Belaunde procedía, pues, de una familia con ‘posibles’. Estudió en el Colegio de la Inmaculada de Gijón y en su equipo de fútbol -rival en los primeros años del Sporting- comenzó a dar sus primeras patadas a un balón, a la par que su hermano Manuel. Tras finalizar sus estudios de Bachillerato, prosiguió su formación en Suiza, y allí continuó con la práctica del hoy ‘deporte rey’. A su regreso a Asturias, con dieciocho años, entrenó con el equipo reserva del Sporting de Gijón y jugó en el Somió F.C. para de ahí pasar, por fin, al primer equipo sportinguista, donde también jugaría su hermano Manuel. Posteriormente, a punto de cumplir los veintiún años, formó parte de la selección asturiana que se enfrentó al Madrid el 26 de octubre de 1910, y que derrotaron a los ‘merengues’ por 0 a 3.
El equipo asturiano estaba formado por Pola; Luis Valdés, Plácido Álvarez-Buylla, Manuel Vior, Quintana, Celso Arango, Luis Belaunde, Genaro Palacio, Salvador Galé, Vicente Álvarez-Buylla y José Olay. La actuación de los asturianos no pasa desapercibida, y cuatro de sus futbolistas fueron fichados por el Athletic Club de Madrid: Belaunde, Arango, Palacio y Olay. En la filial madrileña del club bilbaíno tiene por compañeros a otros futbolistas asturianos, dos pioneros del Sporting de Gijón: los hermanos Fernando y Saturnino Villaverde. Poco después se incorporaría también su hermano, Manuel Belaunde, al club ‘colchonero’, ex jugador, igualmente, del Sporting de Gijón. Sus destacadas actuaciones en el conjunto madrileño le llevan a jugar como cedido en el Athletic de Bilbao, llegando a proclamarse campeón de la citada Copa de 1911 con el equipo vasco, con gol suyo incluido en la final. Dos asturianos fueron campeones de Copa ese año: Belaunde y Arango.
Luis Belaunde -además de jugar en el Somió, en el Sporting y en el Athletic de Bilbao- disputó cinco temporadas en el equipo rojiblanco madrileño, con la particularidad de que, en la última, la de 1915, alternó su presencia en las alineaciones del conjunto ‘colchonero’ con las del ‘merengue’ sin mayor problema. Ese año disputó seis encuentros oficiales con el Athletic Club de Madrid y dos con el Madrid C.F. (cuando aún no ostentaba el título de ‘Real’). Lo hizo entrenando simultáneamente con ambos equipos durante buena parte del curso. Con el Madrid debutó en un encuentro enfrentándose al Fútbol Club Barcelona y logrando un triplete (habiendo jugado el día anterior un partido con el club colchonero), en un enfrentamiento que finalizó con un empate a seis goles. Su segundo y último partido oficial vistiendo el uniforme blanco fue la final de la copa ante el Athletic de Bilbao, que finalizó con victoria vasca por 4 a 0. Casado con la vizcaína Asunción Fernández Montero, natural de Balmaseda, Belaunde fijó su residencia en El Escorial, localidad madrileña donde falleció el 21 de abril de 1962.
¡Qué buena historia la del abuelo Luis! Gracias por recordarla.