Carolina López es maestra y lleva años contando en sus clases algunos de los cuentos que ella escribe. Dice que los alumnos son su inspiración, y también sus mejores críticos. Acaba de publicar un nuevo título y de lanzar, además, su propia editorial, Trastín Ediciones, «fruto de la ilusión y las ganas de que las historias -propias y ajenas- lleguen a los más pequeños». Su sueño es seguir ofreciendo a través de sus cuentos «ventanas abiertas a la imaginación y viajes a mundos desconocidos». López, que acaba de ser madre, tiene ahora a quién transmitirle en casa su pasión por la literatura infantil. Seguro que nunca ha leído sus cuentos con tanto amor.
– Dices que la felicidad es un camino, no un destino. ¿A ti qué es lo que te hace feliz?
– La felicidad día a día me la da mi familia, a la que adoro, y mi bebé que me hace sonreír haciendo que el camino sea bonito y especial. Además me considero una persona afortunada porque me hace feliz mi trabajo, escribir historias y contarlas al público infantil. ¡Me encanta realizar cuentacuentos!
– Maestra de educación infantil que, tal y como acabas de contarnos, decide empezar a escribir. ¿Qué es lo que te llevó a hacerlo?
– Empecé contando en clase mis historias, y al cabo de unos días los alumnos me pedían que las volviese a contar. Al hacerlo, las historias cambiaban un poquito y ellos se daban cuenta y protestaban: «Así no era profe» me decían. Eso me llevó a ir escribiendo aquellas que mejor funcionaban en el aula, y un buen día, tras un café con una gran escritora, me decidí a dar el paso y enviar mi primera obra ‘Pablo… ¿no tiene corazón?’ a diferentes editoriales.
– ¿Qué podemos encontrar en ese primer libro?
– Encontramos una historia llena de sentimientos, tristeza, preocupación, alegría, amor… junto con valores tan importantes como la amistad. Además, y después de contar muchas veces esta historia y hablar con maestras, psicólogas, libreras que la han usado en sus clases, en sus consultas y talleres, me doy cuenta de que su punto fuerte es que la historia está escrita de una manera en la que ellos pueden verse fácilmente reflejados.
– Supongo que tus alumnos te han ayudado mucho a la hora de contar historias para los más pequeños.
– ¡Por supuesto! Mi alumnado es mi inspiración, escribo por y para ellos. Además ahora son siempre mis primeros oyentes y esto me sirve para ajustar el texto. Es increíble lo que me ayudan a mejorar un cuento ya escrito. Nunca envío/ publico nada sin que haya pasado por ellos, y vea que les gusta.
– Y también fundamental en tus cuentos es la ilustración.
– Este es uno de los aspectos que más difícil me parece a la hora de sacar adelante un texto. Es muy importante escoger a la persona correcta para ilustrar. La relación que se establece es especial, hay que tomar muchas decisiones y a mí me gusta que se haga de manera conjunta, aportando cada una su visión y llegando a acuerdos comunes. A lo largo del proceso son muchas las llamadas, los mensajes (a veces a horas ‘inapropiadas’)… De ahí que este paso requiera su tiempo y la elección se haga en base a su portafolio, pero también escuchando un poco la sensación que te da la otra persona.
– Ahora acabas de publicar ‘Una jirafa en el bosque’, una historia que pone en relieve la diversidad, el vencer miedos para cumplir sueños… donde todos podemos vernos reflejados.
– Es una historia muy especial, ya que la escribí durante el confinamiento del año pasado. Yo estaba embarazada y escribir fue una vía de escape porque no salía nada a la calle, ni siquiera para bajar la basura. La historia de Maca, mi pequeña jirafa como me gusta llamarla a mí, surgió a través de una ilustración que Krys, la ilustradora, ya tenía.
Es una historia con un toque inclusivo, al final nuestras historias son reflejo de lo que nosotros somos, y en este sentido haber trabajado como maestra de Educación Especial deja huella.
– ¿Qué son los cuentos para ti?
– Los cuentos son la mejor ‘herramienta’ que puedo tener como maestra y como madre. Son ventanas abiertas a la imaginación, viajes a mundos desconocidos, nos ayudan a empatizar, a ampliar conocimientos, a calmarnos o a activarnos… Pero, sobre todo, el cuento da pie a momentos mágicos tanto en soledad como en compañía.
– Lo difícil en estos momentos es conseguir que te publiquen.
– Actualmente el mercado editorial es complicado. Se publican muchísimos libros día a día y es difícil que una editorial tradicional apueste por alguien desconocido aún en este mundo.
Sin embargo, se han puesto de moda las editoriales de coedición y tiene su razón de ser, es bueno que haya diferentes modalidades de publicación y que la gente pueda elegir. Siempre y cuando las condiciones estén claras cada uno debe elegir aquella opción que mejor vea.
– Tú, de hecho, has creado tu propia editorial.
– Es una decisión que costó mucho tomar. El mercado es difícil y aquello que me ofrecían no se ajustaba a lo que yo quería así que busqué otras opciones.
Mi pareja es empresario y fue él quien me animó muchísimo a dar el paso, así que entre los dos nos lanzamos a la piscina. Él lleva la parte de gestión y cuentas que es donde tiene experiencia y yo me dedico a escribir y contar el cuento que es lo que me gusta.
– ¿Qué es Trastín Ediciones?
– Trastín Ediciones es el fruto de muchos años de amor a la literatura infantil, mucha formación relacionada con el tema y, sobre todo, es el fruto de la ilusión y las ganas de que las historias lleguen a los más pequeños.
– Una pequeña editorial independiente que nace para hacer realidad los sueños de aquellos quienes escriben desde y para el corazón. ¿Es difícil cumplir sueños si te dedicas a la literatura infantil?
– Todo depende de los plazos que te marques. Hace un par de años estar donde estoy a día de hoy era mi sueño, una vez conseguido te vas marcando otros. Me gusta pensar que no existen lo imposibles sino los improbables que son por definición posibles así que… ¿por qué no seguir soñando?
– Y, ¿con qué sueñas tú?
– Si hablamos en el ámbito de la literatura infantil, mi sueño es seguir publicando y llegando a muchos hogares. Además, me encantaría asistir como escritora a una firma de libros en una gran feria como Madrid o Barcelona. ¿Soñar es gratis verdad?