No hay marcha atrás. Lo que está hecho y ensayado es lo que hay y se mostrará en las tablas del Jovellanos el sábado 18 y domingo 19
No hay marcha atrás. Lo que está hecho y ensayado es lo que hay y se mostrará en las tablas del Jovellanos, el sábado 18 y domingo 19 de este mes de febrero. Nos referimos al trabajo de las charangas, esa masa multicolor de gentes de todas las edades que derrochan fantasía, ingenio y también, por qué no, un poco de mala leche y acidez a la hora de componer las letras de sus coplas.
En esta ocasión desde miGijón queremos hacer un homenaje a los más “peques” y de paso, a los más veteranos y por lo tanto culpables, en la medida que les toca, de que el Antroxu gijonés siga vivito y coleando como nuestra Sardina Isidrina Windsurf. Echamos moneda al aire y comenzamos aleatoriamente por Folixa pa toos, grupo formado en el año 2008 que ensaya en el cine de Roces. Teniendo como miembro más joven a Hugo Giraldo, la que sopla más velas es la jovial Meli Collado, incorporada al grupo desde hace ya ocho años.
Al preguntar a Vanesa Agulla, vicepresidenta de Folixa, cómo y cuándo deciden disfraz, cometa entre risas: “En la misma cena que nos sirve Eduardo del Sauco, una vez terminado el desfile”. Y añade: “Empezamos a decir tonterías y chistes y ahí con el subidón de tanto día de fiesta surge lo que será el siguiente tema”. Para subsanar tanto gasto venden lotería, “qué remedio nos queda” asegura su marido Iván González, que junto a ella y sus amigos Laura Álvarez y Miguel Ángel González, son fundadores de los de Roces.
De ahí sorteamos calles rumbo al Coto y Pinzales, donde Los Mazcaraos ponen a tono sus turutas y tambores. Puede decirse que la pandemia tuvo mucho que ver con este grupo. Derivados de otras charangas, los cincuenta y dos componentes que la forman, unieron fuerzas y talento para disfrutar juntos de las mascaritas y disfraces. Enol Fernández de un año, es el miembro más pequeño y comparte festejo con Lola Díaz, Rai Moro y Elsa Palacio, unos pocos años más mayores que él.
Seguimos rumbo hacia Nuevo Gijón, concretamente al colegio Antonio Machado. Allí ensayan la mayor parte del tiempo Los Acoplaos. Este año seguramente que tirarán la casa por la ventana porque están de aniversario. Veinticinco años dan para contar muchas anécdotas, desde luego, aunque seguramente que se las reservan para ellos. Lo que si han confesado es que parte de su financiación es a través de la venta de lotería de Navidad y que sus “charanguines” son Mario Jovellanos y Xune Álvarez. Berta Arias, Loli Crespo y Maribel Rodríguez, son las ilustres “charangonas” de la banda.
En el siguiente grupo hay de todo. Parejas de novios, matrimonios muy bien avenidos, “singles” y todos ellos mezclados casi, casi el año entero en el colegio del Piles, donde comienzan a ensayar en septiembre (algunos como Aitana Aguilar y sus padres, desde León). Son Los Gijonudos, que ya por el mes de mayo deciden de qué irán el siguiente Antroxu. Democráticos como ellos solos, cada uno aporta sus ideas para luego quedarse con la que consideran la más acertada. “Somos como una empresa, pero sin sueldo”, aseguran entre risas.
Pilar Fernández y Anabel Pantiga son las super “charangonas” del grupo además de encargadas de que su “charanguines” Adriana Lastra, Yago Díez y Mauro Ibarguen, no se despendolen por el escenario del Jovellanos. Con variedad de premios a sus espaldas “chismorrean” con el humor que los caracteriza que el pequeño Dani Blanco es fruto del “subidón” que produjo en la pareja, que ahora son sus padres, el haber ganado un segundo premio en el año 2020.
En otro colegio, en este caso en el público de Xove, al que le lanzan besos a “puñaos” desde aquí, los de Xaréu nel neñu afilan plumilla. Como bien adelantaron a la que suscribe, el encargado del asunto Marcos Morán está muy, pero que muy puntilloso este año. Anda dando el último repaso a las letrillas de los “cancios” desde la sidrería El Pedreru, patrocinador de este grupo de cincuenta y dos almas y asegura que el tema es de lo más claro y directo. ¿A quién irá dirigido tanto misterio? No tenemos ni idea, lo que está claro es lo agradecidos que están al barrio de Jove, que les aguanta con sus mil ensayos, a la Asociación de vecinos de Portuarios, por facilitarles el lugar donde confeccionan los trajes. Y les despedimos descubriendo a parte de sus miembros, los “especiales”, por tener los años que tienen. Así pues, destacan en la casilla de salida de los más curtidos en batallas: Adelaida Elez, Adriana Benítez, Lola Villanueva, Rosa García, Javier Migoya y Gloria Fernández. Junto a ellos los niños y niñas: Aila y Noa Martín; Enzo y Mara Sánchez, Unai López y Adrián García.
Lo que no es ningún enigma, así que Gelina Flecha, compañera de la Sardina, nada tendrá que investigar, es lo encantados que están Los Tardones con las nuevas incorporaciones de este año. “Se ha notado tanto las ganas de trabajar…que solo estamos contando las horas y los minutos para que empiece todo” asegura Aroa González, presidenta de estas sesenta y cuatro personas que el pasado diciembre cumplieron su promesa de bañarse a principios de año. Y todo por haber ganado el concurso del año pasado. Así que expectación total a la promesa de esta edición. Conociéndolos podemos creernos cualquier cosa, pero hay que esperar. Mientras tanto y no, damos la bienvenida al chiquitín Tiago Acebo que con solo seis meses ya desfilará por las calles de Gijón y a Javier Beltrán, Conchi Cortina, Geli González, Alejandro Peña, Nico González, Enzo Fernández, en la foto pura imagen de la felicidad.
Con una vista privilegiada, desde el local de la asociación Virgen de la Soledad, en Pescadores, los alocados treinta y siete de Perdíos de los Nervios (bien podría ser el título de una película) a estas alturas se entregan a lo llegue: “que sea lo que la Sardina quiera”. Con esa ironía subirán a escenario porque “no haremos sangre, nuestra línea será más bien de comedia” afirman. Aseguran también estar encantados en Pescadores. “No queremos movernos de aquí…si casi vemos llegar a la Sardina…” Bajar solo bajan para cenar en los locales de sus patrocinadores Dakar y Pizzería Suiza. Presentan con orgullo a Braulio Rubio, Manuel Ceñal, Tere Alonso y Marga González, los maduritos del grupo y a Lucía Gutiérrez, Leo Fernández, Mateo Gutiérrez y Gisela López.
Con el lema de “se busca barrio para charanga” comenzamos charleta con Marcos González “jefe” de La última y marchamos, al que, por cierto, encontramos sentado en una tumbona de playa, haciendo guardia bajo la ventanilla de la taquilla del teatro Jovellanos, el día antes de que salieran a la venta las entradas de los concursos de fin de semana. Pero a lo que íbamos, estos sesenta gijoneses unidos desde hace tres años, son uno de cada punto de la ciudad por eso la gracieta de que buscan ubicación fija.
“Este año vamos a sacar la guillotina” amenaza entre risas González “Vamos a cuchillo” prosigue refiriéndose seguramente a todo lo acontecido con las decisiones consistoriales de los últimos tiempos. Así que no se dejen embelesar por la tierna imagen que mostramos de los “charangones” Toni Blanco y Eva González con los infantes Aitana Fabián y Cristina Morán. Bajo esa “asemeya” inocente hay todo una chispa ácida y cortante a punto de estallar.
O restallar como los cincuenta componentes más “satélites” que integran Los Restallones. Su presidente Fran Rodríguez recordó que ensayan en Santa Bárbara y se financian con una cuota mensual y aportaciones particulares. En sus filas está la “charangona” de todas las “charangonas” la octogenaria Gloria Fernández, que no solo colabora en todo, si no que baila y recorre escenario y desfile como la primera. ¡Eso ye ser antroxera! Desde luego da ejemplo a los más chiquillos que son: Gabriela Amado, Lucía Álvarez, Celia Álvarez, Julia Granda y Bruno Crespo.
Pero si hay empeño y resistencia en este singular festejo es el de Os Braxileiros do Xixón y Kop’A Vino. Ambos llevan desde el año 1987 sin faltar a una cita carnavalera. Los primeros, estrujan cabeza y pasos en el colegio público Lloreu. Están sumamente contentos porque este año ha habido muchas incorporaciones y eso produce un buen subidón. Además, como apostilla Tania García, su presidenta “ayuda a maquinar nuevas propuestas”.
Una de las cuestiones por la que Os Braxileiros llevan tanto tiempo resistiendo, incluso una pandemia, es por su orden a la hora de llevar cuentas, destinar tareas e inculcar a los que van naciendo, que han sido muchos a lo largo de tanto año, el amor por la fiesta. Saber posar, saben a la perfección y así lucen en la imagen los “taitantos” Daniel Rodríguez, María Isabel Fernández e Isabel Vega y los “menostantos” Eric Martino al que hay que tener todavía en cuello; Nora Vietes, Alex Pendones y Marco Álvarez.
Los de Ko’P Vino, empapan de fantasía al barrio de Contrueces, desde hace ya treinta y seis años, que se dice pronto. En estos momentos están a pleno rendimiento porque no quieren dejar ni un cabo suelto en lo que serán sus intervenciones tanto en el escenario del Jovellanos como en el desfile del lunes. Descubren a Vicente Lozano, como el más “madurito” y a la más inocente, por ser la “charanguina” más joven a Noa Morés. Agradecen desde estas líneas las ayudas que les brindan cada año tanta la Asociación de Vecinos Los Ríos y el AMPA de los colegios Noega y Piñole.
Todos ellos dan la bienvenida a una nueva formación La Vieja Guardia que se une a ellas para hacer del Antroxu una fiesta imprescindible en el calendario nacional.