Los firmantes denuncian sentirse expulsados de su propio barrio por la presión del ocio y la especulación
La Asociación Vecinal Gigia Cimavilla ha hecho entrega este miércoles a la alcaldesa de Gijón, Carmen Moriyón, de un total de 1.552 firmas recogidas en el barrio para exigir la retirada del evento “Paseo Gastro”, previsto para celebrarse en la calle Claudio Alvargonzález durante el verano. La iniciativa, impulsada por el Ayuntamiento, ha desatado una oleada de críticas vecinales, que consideran que supone la gota que colma el vaso en un contexto de creciente malestar por la presión del turismo y el ocio nocturno en la zona.
«Estamos cansados del ocio nocturno, de que Cimavilla sea solamente un barrio para esparcir, todo lleno de hostelería», denuncia Carla Petrelli Petroff, de la Vocalía de la Mujer de la asociación vecinal. “Somos muchos vecinos y vecinas los que vivimos ahí y también tenemos otras necesidades”.
En la carta entregada a la regidora, los vecinos subrayan que Cimavilla es un barrio con una profunda carga histórica y social, «pieza fundamental en la transformación de la ciudad», pero que en los últimos años se ha visto deteriorado por la masificación turística, la proliferación de pisos vacacionales y la saturación de eventos. La asociación reclama atención urgente no solo a las carencias materiales del barrio, sino también a la pérdida de identidad y del tejido social.
Sergio Álvarez Barrera, presidente de la AVV Gigia Cimavilla, considera que la instalación del “Paseo Gastro” es el síntoma de una desatención institucional prolongada. “Hasta ahora todo el mundo es conocedor de los problemas que tiene el barrio con el ocio nocturno y la convivencia ciudadana. Pero lo que ha colmado el vaso es que el Ayuntamiento, en lugar de corregir esta situación, incrementa todavía más la presión cerrando una de las salidas del barrio para poner más bares aún”, critica.
Además de la suspensión del evento gastronómico, el colectivo vecinal plantea otras medidas urgentes: mayor dotación policial durante los fines de semana y en fechas clave, aplicación estricta de la ordenanza de convivencia ciudadana y participación de representantes del barrio en las comisiones de seguimiento de seguridad.
La iniciativa ha sido impulsada con el lema “Cimavilla, un barrio donde poder vivir”, y, según sus promotores, busca defender un modelo de barrio inclusivo, habitable y compatible con un turismo sostenible. “Tienen que tomar medidas y contar con los vecinos y vecinas del barrio de Cimavilla para poder llevar ese turismo sostenible del que tanto alardea el Ayuntamiento”, subraya Álvarez Barrera.
La asociación recuerda que el barrio ya colabora con el Ayuntamiento en proyectos como el plan de acción integral financiado con Fondos FEDER, y mantiene su voluntad de diálogo. Sin embargo, exige que este se traduzca en hechos. «Cada día es más difícil vivir. Y esta vez ni siquiera fuimos informados: nos enteramos por la prensa», lamentan.
La verdad es que es un poco cansino este tema de Cimavilla, el «barrio» mas céntrico de Gijón. Posiblemente el presidente de la Asociacion de Vecinos Gigia no había ni nacido cuando Cimata estaba repleto de bares nocturnos que ahora ni existen como por ejemplo: el Escocia, la Foli, el Baleal, la Cirigüeña, el Marinos, el Clásico, el Belfast,… Durante décadas y hasta entrado el siglo XXI, Cimata estaba repleto de bares en los que no se respetaban ni horarios ni aforos ni decibelios…con horarios de cierre cercanos a las 8 de la mañana que por cierto «sufrí» durante años como trabajador en uno de esos locales. Por tanto estar ahora con esta cantinela diaria como si fuera un barrio tranquilo de pescadores que la derechona esta destrozando me parece cuanto menos lamentable. Por favor dejad de llorar ya!! Es como si vives enfrente de la Playa San Lorenzo y te quejas de la humedad, o en el entorno del Molinón y lo haces por no poder aparcar los días de partido… Como se suele decir: «Ye lo que hay!!»