Las empresas asturianas debaten sobre la reducción de la huella de carbono en el marco de la transformación digital, que les permite ser más competitivas
La Cumbre de la Industria y Tecnología reunió hoy en la Feria a administraciones y entidades públicas, empresas y profesionales del sector tecnológico en Asturias. Todos bajo una premisa en común: el reto que tienen por delante las empresas para subirse al tren de las nuevas tecnologías y la lucha contra el cambio climático.
Rubén Pérez Sobrino: business director de Seresco: “Se avecina una gran transformación en las empresas”
Sobrino abrió la jornada con la charla “Tecnología e industria sostenible”, señalando al cambio climático como el gran reto que habrá de afrontar nuestra sociedad en los próximos años y especialmente las empresas, que tendrán que adaptarse a la transformación digital para reducir sus emisiones y su huella de carbono. El director de negocios de la empresa asturiana Seresco aseguró que “lo mas difícil no va a ser la inversión en tecnología, sino transformar el esquema mental para mentalizarse de que el inicio del cambio es ahora. Tenemos que ser conscientes de que cada decisión tendrá un pequeño impacto sobre el ecosistema”.
Seresco es pionero en el uso de la tecnología aplicada a diferentes sectores industriales, que ayuda a las empresas tanto para ser medioambientalmente sostenibles y fomentar su crecimiento. “La tecnología va a transformar la organización de las empresas”, aseguró Pérez Sobrino. “Nos vamos a reinventar en los proximos 10 años.
“El tejido industrial asturiano cuenta con todos los ingredientes para confiar en el futuro a corto y largo plazo”
En el Palacio de Congresos también se habló de los “retos de la sostenibilidad en la industria” y la irrupción de las nuevas variables a raíz de la guerra de Ucrania: la subida del precio de la energía y las incógnitas sobre los suministros. Una mesa redonda en la que participaron Carlos García, director de la Fundación Asturiana de la Energía, Yolanda Fernández, directora de Medio Ambiente, Sostenibilidad, Innovación y Cambio Climático de EDP España, Paz Orviz, gerente de Cogersa, Juan Ibáñez, director de Sostenibilidad, Seguridad, Salud Laboral y Medio Ambiente de Ence y Yago Somoano, director de proyectos de innovación de Hunosa.
Todos ellos coincidieron en la necesidad de llevar a cabo una transformación industrial de forma sostenible, cada uno con diferentes objetivos en el horizonte. El de EDP, la descarbonización total en 2030 y la producción de su energía 100 % renovable en el que tienen previsto invertir 24.000 millones de euros en los próximos años. “Cada uno de nuestros emplazamientos va a poner en marcha proyectos diferentes, tanto en la central de Soto de Ribera como la de de Aboño, que girarán fundamentalmente en torno a la generación de hidrógeno”, avanzó Yolanda Fernández. En Cogersa el reto es la construcción de una planta de clasificación y tratamiento de la bolsa negra que permitirá poner fin a partir de 2023 a los depósitos directos en el vertedero. “Esos materiales se transformarán en forma de combustible”, explicó Paz Orviz.
Por su parte, la industria papelera Ence trabaja en dos líneas: la producción de celulosa que genera energías renovables cuyo excedente aportan al mix energético y la producción de biomasa. “Tenemos en marcha un proyecto para extraer de la celulosa de papel un combustible que va a reducir en un 80 % la producción de CO2”, señaló Juan Ibáñez. En Hunosa, su objetivo a medio plazo es también la producción de biomasa. “Somos un referente europeo a nivel de geotermia aprovechando el agua que inunda los pozos que están cerrados”, explicó Yayo Somoano.
“Necesitamos aprovechar el talento que se genera en nuestra región«
En el CITECH Day en la FIDMA también hubo tiempo para hablar de cómo la revolución digital ha venido para mejorar la productividad de las empresas en la mesa redonda “Industria 4.0 y Transformación digital en la Empresa Asturiana”. Jose Esteban Fernández Rico, decano del COIIAS, señaló que “lo que ya estamos alcanzando es apasionante”. Y sin embargo, el cambio digital apenas ha llegado a una mínima parte del sector empresarial de nuestra región. El dato lo dio Eva Pando, directora general de IDEPA: “De las 60.000 que hay en Asturias, las empresas innovadoras apenas son un 1%”. Pando hizo hincapié en la necesidad de subirse al tren del cambio.
Para ayudar a este cambio, el gobierno del Principado cuenta con una red de apoyo que asesora y canaliza diferentes ayudas, 30 millones de euros desde el año 2015. Desde sus experiencias en Zitrón e Izertis, empresas asturianas referentes en sus sectores, Juan Guzmán Triviño y Roberto Arias advirtieron a las pequeñas empresas que “Si no entran en la rueda de la transformación, cuando se den cuenta ya será demasiado tarde”. Idea que también apoyó Victor J. Martínez, director de R&D y operaciones Idesa, empresa que está también volcada en la innovación en de sus procesos de producción: “Si no buscas la transformación, al final puedes perder tu situación en el mercado y ser menos competitivo”, objetivo para el que será necesario tal y como aseguró Fernando Riaño, director de la línea de negocio de sistemas inteligentes de Duro Felguera, “no desaprovechar el talento que se genera en Asturias”.
“La transición va a ser más complicada en Asturias que en otras partes, pero debemos afrontarla con ilusión”
La encargada de poner el punto y final a la jornada fue Belarmina Díaz, directora general de Energía, Minería y Reactivación, quien tras remarcar que “por las características de nuestra industria tradicional, la transición en Asturias va a ser más complicada”, animó a empresas y profesionales a emprender con ilusión el camino de la transformación digital, que generará un tejido industrial más competitivo y respetuoso con el medio ambiente.