La nueva planta de clasificación de la fracción resto entrará en pruebas en la primavera del próximo año
La entidad ha destinado más de dos millones en ayudas a las parroquias colindantes en la última década
El vicepresidente y consejero de Administración Autonómica, Medio Ambiente y Cambio Climático, Juan Cofiño, ha destacado que el Consorcio para la Gestión de Residuos Sólidos de Asturias (Cogersa) es “un activo esencial en las políticas ambientales de Asturias. También ha subrayado que se trata de una “una piedra angular, por su experiencia en materia de reciclaje y valorización, en la transformación del tejido productivo en el ámbito de la economía circular”.
Cofiño, presidente del consorcio, ha participado hoy en la jornada de puertas abiertas dirigida a los vecinos de las cinco parroquias colindantes al centro de tratamiento de residuos, en Serín, organizada por la entidad con motivo del Día Mundial del Medio Ambiente.
A las diferentes actividades, que han incluido la visita a las obras de construcción de la planta de clasificación de la fracción resto, han acudido los miembros de las asociaciones de vecinos de Campañones (Corvera), Ambás y Tamón (Carreño), Villardeveyo (Llanera) y Serín (Gijón). También han asistido, entre otros, la viceconsejera de Medio Ambiente y Cambio Climático, Nieves Roqueñí, la gerente del consorcio, Paz Orviz, y varios representantes municipales de los concejos colindantes.
La puesta en marcha de la nueva planta de clasificación, a la que se han destinado 60 millones, “supondrá un cambio radical en la operación del centro de tratamiento de residuos, ya que irá desapareciendo forma progresiva el depósito directo en vertedero y, con ello, buena parte de las molestias asociadas a su funcionamiento”, ha resaltado el vicepresidente, quien ha agregado que se prevé que entre en periodo de pruebas durante la primavera del próximo año.
La planta tendrá capacidad para procesar unas 350.000 toneladas de basura contenidas en la bolsa negra y otras 75.000 de materiales no peligrosos. De ellas, aproximadamente la mitad se convertirán en combustible sólido (CSR) y otras 100.000 toneladas lo harán en materiales recuperados.
El vicepresidente ha exhortado a la ciudadanía, cada vez más responsable con el medio ambiente, “a comprometerse cada día con la reducción, la reutilización y el reciclaje”, a la vez que ha valorado la “solidaridad de las comunidades vecinales próximas a las instalaciones del consorcio, que soportan las molestias que conllevan las actividades de tratamiento y eliminación de los residuos municipales procedentes de toda Asturias”. “Es una generosidad poco conocida y reconocida por el resto de los asturianos”, ha agregado.
Cofiño ha subrayado que las relaciones entre Cogersa y el entorno humano “han estado marcadas durante este tiempo por el respeto y la búsqueda de soluciones a los problemas, en aras del equilibrio, el beneficio mutuo y, en definitiva, la buena vecindad”.
Cogersa ha destinado en los últimos diez años más de dos millones a las parroquias vecinas en compensación por los inconvenientes que implica su cercanía las instalaciones. Esta línea de ayudas, de carácter anual, se ha dirigido a la reparación de caminos, la mejora del alumbrado público, la financiación de obras en edificios de uso público o a la organización de actividades sociales, entre otras iniciativas.
El vicepresidente ha repasado la trayectoria “de expansión permanente de Cogersa” que, según ha explicado, “ha pasado de un vertedero en el valle de La Zoreda, inaugurado en 1985, a una suerte de polígono industrial especializado en la gestión de residuos y la economía circular”, en el que se reciben cada año unas 870.000 toneladas de todo tipo de desechos procedentes de los municipios, la industria, los hospitales y la construcción.
Por su parte, Orviz ha asegurado que el crecimiento de Cogersa a lo largo de cuatro décadas se ha producido “con responsabilidad, buscando la armonía con el entorno humano, tratando de minimizar en todo momento el impacto ambiental de su actividad y creando valor con la creación de empleo o la concesión de ayudas económicas finalistas a los municipios más afectados”.
Ley de Calidad Ambiental
Por otra parte, el vicepresidente ha explicado que el Proyecto de Ley de Calidad Ambiental, del que mañana informará en la Junta General del Principado, “persigue compatibilizar la protección del medio ambiente con la simplificación de los procesos administrativos para favorecer el desarrollo económico”.
“La normativa será coherente con lo establecido en la Ley de Medidas Administrativas Urgentes y se convertirá en el principal instrumento jurídico para la prevención y control de la calidad ambiental”, ha añadido Cofiño, para quien la ley “permitirá evaluar los posibles efectos negativos de proyectos y actividades en el medio ambiente, por lo que implanta medidas preventivas y correctoras para minimizar su impacto”.
En su opinión, “permitirá una mayor agilidad en la puesta en marcha de las actividades, al tiempo que mantendrá las garantías y controles que exige el marco comunitario”.