A partir del mes de abril se obligará a las personas con movilidad reducida y tarjeta de estacionamiento a pagar por aparcar en la zona ORA de Gijón, algo de lo que estaban exentos hasta ahora
La Unión de Discapacitados de la Unión de Discapacitados de Asturias (UMA) se han concentrado esta mañana en la plaza Mayor de Gijón en rechazo a la nueva ordenanza municipal movilidad que, a partir del mes de abril, obligará a las personas con movilidad reducida y tarjeta de estacionamiento a pagar por aparcar en la zona ORA de Gijón, algo de lo que estaban exentos hasta ahora. Hasta el lugar se han desplazados miembros de los distintos partidos políticos de la oposición, que han querido así mostrar su rechazo a la medida.
El Comité de Entidades Representantes de Personas con Discapacidad del Principado de Asturias (CERMI-Asturias) ha querido también mostrar su respaldo a esta concentración. En concreto, son contrarios a la obligación a las personas con discapacidad y movilidad reducida a adquirir la Tarjeta ORA para aparcar en las zonas de estacionamiento regulado de la ciudad. Hasta ahora, en Gijón, los titulares de la Tarjeta de Estacionamiento para personas con discapacidad y movilidad reducida estaban exentas del pago de la ORA. Con la entrada en vigor de la nueva ordenanza, deberán abonar la Tarjeta ORA, que tiene un coste de 45 euros.
Según una nota de prensa del Cermi, la medida supone «una injusticia y una pérdida de derechos» y no comprenden «los argumentos que ofrece el Consistorio gijonés», que alega que el objetivo de la nueva tarjeta es evitar el uso inadecuado de las tarjetas de estacionamiento y una mejor gestión del aparcamiento regulado.
Las personas con discapacidad y movilidad reducida señalan que «otras grandes ciudades con una elevada demanda de aparcamiento regulado, como Madrid o Barcelona, conceden la exención del pago de las tasas de la ORA, así como la posibilidad de estacionar en carga y descarga y en lugares donde está prohibido hacerlo». Además, «en Barcelona se permite aparcar en las zonas peatonales», añaden.
Para los afectados, la exención del pago por aparcar en la zona ORA «compensa el sobrecoste económico» que deben asumir para pagar tratamientos médicos o rehabilitación, adaptar la vivienda, adquirir sillas de ruedas, muletas, bastones, grúas, prótesis y órtesis e, incluso, cambiarse de vivienda por falta de accesibilidad.