La Policía busca pistas de la joven en el Cabo Peñas, donde desapareció el pasado martes
Este martes se cumple una semana de la desaparición de Sandra Bermejo. Esta vecina de Gijón, de 32 años, no acudió el martes pasado a su clase de teatro ni respondió a los whatsapp que N.G.D, una de sus amigas, le envió ese mismo día. Ambas se conocieron hace algo más de dos años gracias a ese grupo de teatro, explica N.G.D, que cuenta que “Siempre avisaba, así que le mandé un WhatsApp, pero no me contestó». Al día siguiente Sandra tenía una videollamada acordada con su familia a la que la joven tampoco se presentó, así que se pusieron en contacto con N. para ver si sabía algo de ella. Como nadie sabía nada, pusieron la denuncia en la Policía.
N., amiga de Sandra con la que ha hablado este medio, pide colaboración ciudadana para encontrar pistas que les puedan ayudar a encontrarla. «Cualquier persona que viera algo el martes que por favor se ponga en contacto con la Policía o con los teléfonos del cartel, cualquier información es bienvenida, porque no tenemos de dónde tirar».
«Estuvimos en los dispositivos de búsqueda todo el fin de semana, lo único que se sabe a ciencia cierta es que su coche estaba allí en el Cabo Peñas y la última localización de su móvil es del martes por la tarde allí, pero no pueden seguir el rastro porque hubo muchísima gente ese día. Es todavía más angustioso, es todo muy inquietante», relata N.G.D. Tampoco saben exactamente qué hacía Sandra allí. «Le gustaba pasear y muchas veces hacía rutas sola, pero desconozco si esa es una zona que frecuentara«, añade.
En este sentido, la joven cuenta que tanto ella como la familia de Sandra Bermejo descartan que se haya podido suicidar. «Todos los que la conocemos lo descartamos, la gente que quedó con ella hasta ese día la notó bien, se habría despedido de alguna forma. Además, estuvo agendando citas y reuniones esa misma tarde, no tiene sentido», dice.
Por el momento, no se descarta ninguna hipótesis. «La Policía nos dijo que todo lo que pensásemos que podía pasar eran elucubraciones nuestras», señala N. Tanto ella como su familia están destrozados y piden ayuda para que Sandra aparezca.
