Desde Izquierda Unida (IU-IX), su coordinador Ovidio Zapico había pedido a Tomé que no respalde la comisión tras la dimisión de la consejera

La diputada del Grupo Mixto en la Junta General del Principado, Covadonga Tomé, ha anunciado este lunes su apoyo a la creación de una comisión de investigación parlamentaria sobre el accidente ocurrido el pasado 31 de marzo en la mina de Cerredo, en el concejo de Degaña, donde fallecieron cinco trabajadores. La decisión, ha explicado, responde al respaldo unánime de las bases de su formación en una consulta interna. Durante una rueda de prensa, Tomé ha defendido que «es necesario llegar al fondo de lo ocurrido» y articular las medidas necesarias para evitar que una tragedia similar vuelva a repetirse en Asturias. Acompañada por Xune Elipe y Laura Tuero, la diputada insistió en que «quedan muchísimas preguntas por responder» y que la reciente dimisión de la consejera de Transición Ecológica, Belarmina Díaz, «no parece suficiente para la sociedad asturiana».
Tomé ha calificado la comisión como un «ejercicio de transparencia» y ha planteado que su grupo asuma la presidencia, siempre que cuente con el respaldo de las fuerzas progresistas del Gobierno. «Ofrecemos la garantía de que sea rigurosa, respetuosa y ágil», señaló, desmarcándose de lo que ha considerado una posible «instrumentalización política» por parte del Partido Popular y Vox.
División entre fuerzas políticas
La propuesta ha generado división en el ámbito político asturiano. Desde Izquierda Unida (IU-IX), su coordinador Ovidio Zapico había pedido a Tomé que no respalde la comisión tras la dimisión de la consejera. Según Zapico, “el nuevo escenario” abierto con la salida de Díaz hacía innecesaria la investigación parlamentaria, que considera que sería usada por la derecha para “erosionar” al Gobierno autonómico. Así, el partido defiende que ya existen otras vías abiertas para esclarecer los hechos: una investigación judicial en curso, una comisión de investigación en el Consejo de Seguridad Minera y una inspección de servicios interna. A su juicio, estos mecanismos son “suficientes” para avanzar en el conocimiento de las causas del accidente.
En la misma línea, el secretario general de UGT en Asturias, Javier Fernández Lanero, también ha lamentado el “uso político” del accidente, destacando que la consejera dimitida había mostrado un compromiso claro con la transparencia y la justicia desde el primer momento: “Es injusto con las familias y con la memoria de los fallecidos que se utilice esta tragedia para atacar al Gobierno”.
Una dimisión en pleno debate
La dimisión de Belarmina Díaz fue anunciada en el Pleno de la Junta General el pasado 15 de abril, tras una comparecencia para informar sobre la gestión del accidente. En su intervención, la consejera acusó a PP y Vox de haber politizado el suceso y defendió su labor al frente de la Consejería, reiterando que su salida era un acto de responsabilidad para no obstaculizar las investigaciones. Díaz aseguró que, si se confirma que en el piso tercero de la mina se operaba sin autorización y en condiciones de riesgo, la responsabilidad recaería sobre la empresa Blue Solving y su dirección facultativa. El suceso sigue siendo objeto de investigación judicial y técnica.