Agentes de la Policía Nacional adscritos a la Comisaría Provincial de Lugo, encargados de la investigación de los delitos relacionados con la salud pública, han desarticulado un punto de venta de droga en la Calle Alexandre Bóveda, a escasos metros de un centro educativo, donde se pudo comprobar que se vendía droga a menores de edad. El operativo se ha saldado con una pareja y su hijo detenidos.
Según ha informado la Policía Nacional, en ese operativo se detuvo a tres miembros de una misma familia, dos varones y una mujer de nacionalidad española con edades comprendidas entre los 42 y los 19 años.
Las investigaciones comenzaron a principios del año 2020 debido a la «creciente alarma social que habría generado la presencia de los detenidos en un domicilio de la zona donde era continua la afluencia de personas con aspecto de toxicómanos», indica la Policía, que «tras acudir brevemente al domicilio para adquirir la droga, permanecían en grupos por los alrededores, incrementando más si cabe la sensación de inseguridad entre los vecinos y empresarios de la zona».
Las mismas fuentes policiales señalaron que en distintos momentos se llegaron a producir una serie de reyertas en la zona en las que estaban implicados los investigados.
Las pesquisas realizadas por los agentes comprobaron como el trasiego de personas que acudían al domicilio de los detenidos «era continuo y constante», destaca la Policía, a lo largo de distintas horas del día, por lo que iniciaron un proceso de investigación que les llevó a recopilar distintos indicios acerca de que en dicha vivienda se vendían sustancias estupefacientes. Muchos de sus clientes eran jóvenes menores de edad que acudían al lugar a adquirir sus dosis de droga.
También llamó la atención de los investigadores, el hecho de que durante el período mas estricto de confinamiento domiciliario derivado de la crisis sanitaria, el trasiego de personas que acudían a comprar droga a este domicilio no se redujo en ningún momento, si bien al contrario la afluencia de consumidores a la vivienda de los detenidos aumentó.
Cinco órdenes de busca y captura
Durante la investigación, la Policía pudo constatar también que en el interior de la vivienda se ocultaba un miembro del clan familiar, sobre el que pesaban cinco órdenes de búsqueda y captura, por distintos juzgados de toda Galicia y de Asturias, entre ellas una para el ingreso en prisión de esta persona.
Tras varios meses de investigaciones y recabar los indicios suficientes, los agentes, coordinados por el Juzgado de Instrucción número 1 de Lugo, efectuaron una entrada y registro de la vivienda donde residían los implicados y comprobaron que uno de ellos era el hombre buscado por los juzgados de distintos puntos de la geografía gallega y asturiana.
Asimismo, fueron arrestados la esposa y el hijo de éste tras encontrar en el domicilio distintas cantidades de hachís distribuidas en bolsitas individuales, preparadas para su venta, así como dinero fraccionado y distintos útiles para el pesaje y el empaquetado de la droga.
En el registro se intervinieron armas blancas de grandes dimensiones, «lo que da idea del carácter conflictivo de los detenidos en la operación policial», subraya a Policía.
Había huido en un coche días antes
En cuanto al hombre sobre el que pesaban las reclamaciones, una vez en dependencias policiales, se le imputó ser el responsable de una peligrosa huida en vehículo que había protagonizado días antes tras haber sido interceptado en la estación de autobuses al ver la presencia policial.
Al darle el alto, se dirigió a un vehículo estacionado en el exterior, metió medio cuerpo en el mismo, a través de la ventanilla, y huyó del lugar. En su recorrido impactó contra el turismo de un particular que, al ver la escena, trató de interceptarles el paso.
Los detenidos, una vez finalizadas las diligencias, fueron puestos a disposición del Juzgado de Instrucción número 1 de Lugo, el cual acordó el ingreso en prisión de uno de los detenidos.