Los trabajadores del establecimiento retuvieron al joven hasta que llegaron los agentes tras observar, a través de las cámaras de seguridad, que había sustraído varios objetos

Un intento de robo con un arma blanca de por medio terminó afortunadamente en un susto ayer en Gijón. El suceso lo protagonizó un joven de 27 años, de nombre G. M. S., cuando trató de sustraer varios objetos en un supermercado de la calle Mieres sin que los trabajadores lo vieran. Fueron ellos quienes observaron su comportamiento a través de las cámaras de seguridad y lograron retenerle hasta la llegada de la Policía Local.
Los agentes llegaron supermercado tras recibir el aviso de la sala operativa informando de que los trabajadores tenían retenido a un hombre que había tratado de hurtar varios productos y que además, portaba una navaja. Una vez personados en el lugar, observaron a dos personas sujetando al presunto autor del robo contra la cristalera.
Los trabajadores explicaron que habían visto cómo el ladrón se guardaba distintos artículos de la tienda en su ropa, y que al sorprenderle y pedirle explicaciones, el joven les amenazó con una navaja. Una de las empleadas cerró la puerta para evitar su huida y el detenido le propinó varios empujones, causándole erosiones en el antebrazo y las muñecas. En ese momento, otro trabajador intervino para sujetar al joven y retenerlo hasta la llegada de los agentes, a quienes les hizo entrega también de la navaja tras recogerla del suelo.
Finalmente, los efectivos policiales detuvieron al hombre por un presunto delito de robo con violencia e intimidación ya que tras cachearle, hallaron una lata de cerveza y un ambientador. Fue trasladado, en primer lugar, al centro de salud Puerta de La Villa y, posteriormente, a dependencias policiales.