Hablar de actuar frente a la contaminación y que ningún partido de gobierno (y ahora ya han pasado todos por ese “puesto”) se haya planteado que ejecutar el vial de Jove para sacar el tráfico pesado, el que más contamina con mucha diferencia, del barrio más contaminado como es la Calzada; es infinitamente más importante que cualquier otra actuación para la calidad del aire en esa zona
Tenemos el aire de Gijón estos días un poco para el arrastre. Aunque tarde, se ha activado el Protocolo pertinente para activar una serie de medidas que redunden en que mejore la calidad del aire. Estoy seguro de que muchos de los que habéis decidido leer este artículo recordaréis situaciones similares en los últimos años. Como también recordaréis que una vez que la situación mejore, fundamentalmente por la llegada de la inestabilidad meteorológica, es decir, que llueva, la cosa volverá a su estado inicial. Un estado inicial que consiste, de manera resumida, en que las dos administraciones implicadas en este asunto, el Ayuntamiento de Gijón y el Gobierno del Principado de Asturias, digan que la cosa ha mejorado, que les preocupa la calidad del aire y que están tomando medidas al respecto.
Medidas que se circunscriben básicamente a actuaciones puntuales sobre procesos industriales concretos o sobre el tráfico rodado. Y está bien que se actúe, tanto sobre los procesos industriales de tratamiento de minerales o de descargas portuarias, como sobre el tráfico rodado, en muchas ocasiones caótico y generador indiscutible de contaminación atmosférica.
Pero…. sí, porque existe un “pero” muy grande a todo este respecto, ni estas medidas son suficiente, ni son efectivas.
En primer lugar, el mayor problema de contaminación del aire con el que nos encontramos en la ciudad es el proceso industrial de Arcelor sobre el que, en esencia, no se actúa de una manera real. De igual forma tenemos al tráfico pesado, sobre el que las actuaciones también son siempre de índole puntual.
Hablar de actuar frente a la contaminación y que ningún partido de gobierno (y ahora ya han pasado todos por ese “puesto”) se haya planteado que ejecutar el vial de Jove para sacar el tráfico pesado, el que más contamina con mucha diferencia, del barrio más contaminado como es la Calzada; es infinitamente más importante que cualquier otra actuación para la calidad del aire en esa zona.
Plantear actuaciones de bajo impacto en La Calzada y dejar de lado tanto a Arcelor como al transporte pesado es como ponerse a hacer una casa sin cimientos y sin tejado y preocuparse de la grifería. Es sonrojante.
Pero es aún más sonrojante comprobar cómo, mandato tras mandato, los partidos de gobierno del Ayuntamiento de Gijón cada primer verano tras las elecciones, comienzan reuniéndose con los responsables locales de Arcelor y, supongo, dándoles su parabién a que construyan chimeneas en vez de que instalen filtros. Y no pasa nada, seguiremos respirando sustancias toxicas derivadas de procesos industriales mientras que la inversión pública en una empresa privada nos ciegue, y nos aleje de lo que, por otro lado, se nos llena constantemente la boca, la transición ecológica.
Parece que, en nuestra ciudad, la transición ecológica ha quedado en debates sobre si peatonalizar el muro o no, o si ponemos maceteros en más o menos esquinas. Y mientras este debate sucede, utilizar el tren o las Cercanías ferroviarias en Gijón es más difícil que hace 30 años. Y seguimos, tras más de 30 años sin estación publica de autobuses, planteando intercambiadores que solo traerán colmatación de vehículos y no solucionarán el problema ni de movilidad y menos aún de contaminación.
Nos olvidamos de aprovechar infraestructuras ya construidas, como la barbaridad de túnel que tenemos por debajo de nuestra ciudad y que comunica el este-oeste de nuestro núcleo urbano. Precisamente el eje de comunicación que más utilización del automóvil privado conlleva, mucha más que el eje norte-sur (según los datos arrojados de los dos últimos planes de movilidad redactados, que no aprobados). Este túnel ha pasado a ser un chiste y un chascarrillo, dado que todos sabemos que esa inversión que dotaría a ese túnel de vías y de trenes nunca va a llegar, y por tanto nunca se van eliminar miles de trayectos en automóvil.
De igual manera, en ese debate medioambiental y de calidad del aire, nos seguiremos planteando la utilización de medios de movilidad no contaminantes, como nuestras propias piernas; pero claro, obviando también que la edad media de nuestra ciudad ronda ya los 50 años y seguirá avanzando ante la regresión demográfica a la que nos dirigimos. Y sí, claro que no existe limite físico a la movilidad, y que todos nos sentimos jóvenes, pero en realidad es mentira, es la forma y la excusa de no mirar a las chimeneas del oeste de nuestra ciudad que siguen impasibles a la revolución tecnológica, a la pacificación del tráfico y, sobre todo, a los discursos electorales que se avecinan. Plantear medidas de movilidad modernas y hasta cierto punto snob es una excusa perfecta, tanto para quienes las plantean como para los que se oponen ofuscadamente a ellas, ya que entre unos y otros, generan el suficiente ruido para silenciar el hecho de que entre todos se han cargado la Estación de trenes de El Humedal y esa barbaridad ha hecho descender el uso de las Cercanías ferroviarias en más de un 40% y por tanto ha incrementado el transporte por carretera y el transporte en vehículo privado.
La inicial propuesta de tren ligero o tranvía que daría servicio al eje este oeste, y que el dúo Cascos/Areces (el alcalde de su última etapa política) despreció a cambio de más tuneladora y más hormigón.
En cuanto al imprescindible vial de Jove y sus expansivos presupuestos sobre el papel que casi se duplican de ejercicio en ejercicio ¿de verdad el presupuesto municipal y autonómico no dá para su ejecución o arranque al menos, aunque luego se reclame su parte al ministerio?. Apenas 2 kms de vía rápida,…
No sólo eso, sino que en la propuesta , idílica, de llevar el «metrotren» hasta Cabueñes se volvió a descartar llevarlo en superficie para continuar el túnel, lo que supone 50 millones de euros más, cierto es que es una fantasía sobre una fantasía.
Respecto al vial de Jove me temo que está será la tendencia para esta tierra en clara recesión demográfica.El estado no va a invertir 167 millones en Jove pq tiene otras preferencias y, desde aquí, sean unos u otros, no se hace ninguna presión, lamentablemente.