Con la presencia de la bacteria E.coli confirmada por el Principado, el alcalde, Ángel García, recuerda que en dicha zona «hay una cooperativa» encargada del suministro, aunque adelanta que ya se han puesto a disposición de los vecinos cubas de agua
Pulso entre los vecinos de Espiniella y el Ayuntamiento de Siero. Apenas dos días después de que saliese a la luz la presencia de la bacteria Escherichia coli (E.coli) en el agua de dicha zona del concejo, un problema confirmado por el Gobierno del Principado, el alcalde, Ángel García, ‘Cepi’, comparecía este viernes ante los medios acompañado por su concejal de Medio Rural, Alejandro Villa, para analizar la situación… Y dejar claro un detalle capital: el Gobierno sierense está más que dispuesto a tomar cartas en el asunto y a hacerse cargo del vital líquido, siempre y cuando sea formalmente solicitado. Y es que, recordaban ayer ambos dirigentes, en Espiniella el suministro de agua está bajo control de una cooperativa, de modo que es responsabilidad de sus miembros decidir en asamblea qué pasos dar.
«Es algo que, a día de hoy, no han hecho», acotaba ‘Cepi’, tratando de aplacar el malestar de una población, la de la zona afectada, incapaz de beber o asearse con el agua que mana de sus grifos, y que ya ha clamado por la toma del control municipal del suministro. A ese respecto, el regidor insistía ayer en que, si los socios de la cooperativa toman esa decisión, «desde el Consistorio pondremos en marcha los trámites, como hicimos en otras zonas». Eso sí, hasta entonces en Gobierno no se han quedado de brazos cruzados. Tal como detalló el edil de área, Villa, por ahora Siero se ha puesto a disposición de los habitantes de Espiniella para aportar agua a bordo de cubas portátiles, algo que sí ha sido pedido. «Estamos aquí para ayudar, y tienen el ofrecimiento del Ayuntamiento para hacerlo en todo lo que podamos», zanjaba el concejal de Medio Rural.
