La Consejería de Medio Rural y Política Agraria anuncia que dotará de más fondos la partida destinada al control y promoción del embutido de Indicación Geográfica Protegida (IGP)
La fama del chosco de Tineo busca seguir creciendo. La Consejería de Medio Rural y Política Agraria ha reforzado su apoyo al alimento asturiano destinando más fondos para su control y promoción. En concreto, la partida para la certificación sube un 14,85% respecto a 2023, al pasar de 16.500 a 18.975 euros. Las acciones de difusión, por otro lado, cuentan con un presupuesto de 37.865 euros. El consejero Marcelino Marcos y el presidente del consejo regulador de la Indicación Geográfica Protegida (IGP) ‘Chosco de Tineo’, Agustín Menéndez, han presentado este jueves los resultados de cierre de la pasada campaña, que se saldó con 71.000 unidades certificadas, lo que supone un nuevo récord.
La producción del embutido tinetense aumentó por tercer año consecutivo en 2023 con un aumento del 12,7% respecto a 2022. Marcos ha valorado las cualidades de este «embutido único» que ya forma parte de la marca ‘Alimentos del Paraíso Natural’ y los buenos resultados en ventas. A su juicio, el éxito responde a la excelencia del producto, elaborado de manera artesanal con los más altos estándares de calidad, además de la eficaz labor de difusión. El número de contraetiquetas, que distinguen el embutido certificado, ha ido creciendo de forma constante. Así, de las 53.000 unidades certificadas en 2020 se pasó a 60.000 en 2021, 63.000 en 2022 y 71.000 en 2023, una cifra histórica.
En la difusión del chosco en el último año también han influido otra serie de hitos como el Festival del Chosco de Tineo, que tuvo gran relevancia para el concejo, además del nombrar a Nacho Manzano como Embajador de honor del producto. Todo ello ha contribuido a difundir las cualidades gastronómicas del embutido a nivel internacional en opinión de sus responsables.
La campaña de promoción para este 2024 tiene como lema ‘¡Qué arte! Chosco de Tineo, sabor de autor’ e incluye a destacadas personalidades del ámbito de la gastronomía, el arte, la música, el deporte, el periodismo o el cine que ensalzan las virtudes del producto. El consejo regulador persigue «relacionar el embutido con personas que entienden el valor de las cosas bien hechas, defienden con estilo propio sus disciplinas y promueven el bienestar y la satisfacción personal», según manifiesta la Consejería en su comunicado.