Barbón admite que «la situación sigue siendo compleja» por la falta de lluvias, y anuncia que pedirá a Madrid ampliar la lista de ‘zonas catastróficas’; el frente abierto en Ibias, que ha obligado a evacuar varios pueblos, es el más preocupa este miércoles

Ya se han visto treguas parecidas en las últimas semanas, y por eso es de lo más recomendable no dejarse llevar por el optimismo antes de tiempo, pero… Se podría decir que este miércoles la mordedura de los incendios forestales en torno al ‘cuello’ de Asturias vuelve a aflojar. En comparación con el parte facilitado anoche por el Servicio de Emergencias del Principado (SEPA), esta mañana era siete los focos registrados en la región, y sólo cuatro de ellos permanecían plenamente activos, con otros tres ya estabilizados. Eso sí, los primeros siguen despertando la inquietud de los integrantes de los equipos de extinción desplegados en los distintos frentes. Sobre todo, uno de ellos: el de Ibias, iniciado ayer martes y que, a estas horas, ya ha obligado a desalojar varias localidades demasiado cercanas a las masas de humo y al avance de las llamas. De ahí que, aun a pesar de las buenas noticias, un preocupado Adrián Barbón, presidente del Principado, haya admitido que «la situación sigue siendo compleja«, especialmente por la ausencia de lluvias y el riesgo «muy alto» que persiste, según el Instituto de Recursos Naturales y Ordenación del Territorio (INDUROT).
En el caso de Ibias, se ha estado trabajando toda la noche hasta lograr controlar su flanco izquierdo sobre un cortafuego, pero en el ala derecha ese control sólo es parcial, y una parte de ese frente ha avanzado hacia una zona de difícil acceso, por debajo de los núcleos de Villamayor y Villarcebollín, los dos primeros pueblos evacuados ayer. En el lugar combaten efectivos de Bomberos del Principado, de las Brigadas de Refuerzo de Incendios Forestales (BRIF) de Tineo y Ruente, de la Unidad Militar de Emergencias (UME) y de hasta cuatro empresas forestales, con apoyo aéreo de dos helicópteros autonómicos, otro de Ibias y un cuarto del Ministerio para la Transición Ecológica y Reto Demográfico (MITECO), así como de un avión adscrito a ese último organismo. A su vez, en tierra la maquinaria pesada opera desde las seis de la mañana, contando con dos retroexcavadoras y tres bulldozer. Todos esos recursos están siendo coordinados desde el Puesto de Mando Avanzado, trasladado por seguridad a San Antolín de Ibias. Y, a modo de detalle que permita comprender la gravedad de la situación, algunos de los lugareños desalojados tuvieron que serlo por aire, dada la imposibilidad de trasladarlos por carretera hasta las zonas seguras.
Cabrales y Quirós, grandes ausentes en la lista de ‘zonas catastróficas’
Por otro lado, continúan las labores de extinción en el incendio de Degaña, donde se mantienen los trabajos de defensa sobre la línea divisoria entre Asturias y León. Por ello, hoy miércoles se continuará intentando sofocar en las lenguas que entran del incendio leonés de Anllares del Sil, una responsabilidad encomendada a Bomberos de Asturias y a la BRIF de Puerto El Pico sobre el terreno, con dos bulldozer, y a dos helicópteros bombarderos en el aire. Paralelamente, la UME y la citada BRIF mantienen tres depósitos auxiliares para recarga de agua, con capacidad para entre 12.000 y 16.000 litros. Ya en suelo de Cangas del Narcea, en Genestoso, el fuego procedente de la leonesa Orallo está estabilizado y controlado en el sector de Cabril y Llamera, y se trabajará en evitar posibles reproducciones; aquí trabajarán los Bomberos de Asturias, la UME, una empresa forestal y una retroaraña, además de un helicóptero aportado por el MITECO. Respecto a Caunedo-Gúa-Perlunes, en Somiedo, el foco está bastante estable, aunque continúa el riesgo de reproducciones, razón por la que siguen desplegados bomberos autonómicos, una empresa forestal privada y dos helicópteros, uno asturiano y otro del MITECO. Finalmente, están estabilizados los frentes de La Uña-Arcenorio, en Ponga; de Camarmeña, en Cabrales, y de Tuña-Merillés, en Tineo.
Agotados tras tantos días de batalla sin tregua, los profesionales de extinción han recibido esta mañana, desde el Centro de Coordinación Operativa Integrado (CECOPI), la felicitación de Adrián Barbón, agradecido con un trabajo nocturno que ha permitido «anclar muchas partes de ese fuego (el de Ibias), aprovechando la red de cortafuegos que existe en el lugar«. Precisamente por eso el presidente autonómico Barbón ha querido dirigirse a la ciudadanía para recordar que «cuando se determina la necesidad de un desalojo, y en este caso era por la llegada de humo, siempre se hace por la seguridad de las personas«. Por otro lado, preguntado por los periodistas por la declaración, por parte del Gobierno central, de varios puntos de la región como Zonas Afectadas Gravemente por una Emergencia de Protección Civil (ZAGEPC), y por la ausencia en esa relación de otros territorios asturianos igualmente perjudicados por las llamas, como Quirós o Cabrales, Barbón ha adelantado que solicitará la integración de tales áreas en la lista final.