«La limitación en la actualización de la renta en los alquileres, ha generado preocupación en los propietarios», explica la abogada Nuria Lavín

El mercado del alquiler en Asturias sigue mostrando signos de una escalada constante en los precios, sin dar tregua a inquilinos que buscan una vivienda en la región. Según los últimos datos publicados, el precio medio del alquiler ha subido un 12,7% interanual este enero, situándose en niveles que comienzan a ser inasumibles para muchas familias. A este encarecimiento se suma el efecto del IPC, que continúa afectando la actualización de las rentas en contratos en vigor.
Uno de los factores que contribuyen al encarecimiento del alquiler es la actualización de los contratos según la evolución del Índice de Precios al Consumo (IPC).
El IPC es el incremento que pueden realizar anualmente los propietarios al precio de la vivienda conforme a los datos publicados por el Instituto Nacional de Estadística (INE), lo que provocaba aumentos significativos en periodos de inflación elevada.
¿Qué se intenta con la nueva Ley de Vivienda? Pues que dicha subida se vea limitada de la siguiente forma:
- Para aquellos contratos del año 2023, en ausencia de acuerdo entre las partes, el límite de subida es un 2%.
- Para los contratos que tenga que ser actualizada la ley entre el 1 de enero de 2024 y el 31 de diciembre de 2024, lo que pacten las partes, y en caso de ausencia de pacto, el límite máximo es el 3 por ciento.
¿Y a partir de 2025? Comienza a ser efectivo el nuevo índice establecido por ley, el cual pretende evitar incrementos desproporcionados en la renta de los contratos de arrendamiento. Por ende, se debe utilizar el índice publicado por el INE, que se denomina “IRAV”.
Pese a este límite, el mercado sigue tensionado por el desequilibrio entre oferta y demanda. La falta de pisos en alquiler empuja los precios al alza, especialmente en ciudades como Gijón y Oviedo, donde encontrar una vivienda asequible se ha convertido en un desafío para muchos.
Aspectos legales y derechos de los inquilinos
Desde el punto de vista legal, la situación genera incertidumbre tanto para inquilinos como para propietarios. Nuria Lavín, abogada en Servanda Abogados, explica: «A pesar de que la ley busca equilibrar la relación entre arrendadores e inquilinos, algunos propietarios perciben que las nuevas limitaciones pueden reducir su margen de maniobra en la gestión de sus inmuebles. La aplicación del nuevo índice de referencia a partir de 2025 y la posibilidad de que las zonas tensionadas impongan límites adicionales han generado preocupación en el sector. No obstante, la ley también incluye incentivos fiscales para fomentar el alquiler a precios asequibles.»
Lavín también señala que es fundamental revisar bien los contratos antes de firmarlos y acudir a asesoramiento legal en caso de dudas. “Muchas personas desconocen que existen mecanismos de defensa frente a subidas abusivas o cláusulas abusivas en sus contratos”, añade.
A corto plazo, el panorama no parece cambiar. Mientras la oferta siga siendo escasa y la demanda continúe en aumento, los precios seguirán en una senda alcista. Tanto inquilinos como propietarios piden soluciones, ya que los primeros enfrentan dificultades crecientes para encontrar viviendas asequibles y estables, mientras que los segundos buscan garantías sobre la rentabilidad de sus inmuebles en un mercado con nuevas regulaciones.
El mercado del alquiler en Asturias sigue en un punto crítico, y su evolución dependerá de las medidas que se adopten en los próximos meses.