Las aportaciones, formuladas por once entidades con presencia en el Consejo Local de Prevención de Residuos, se encuentran en fase de valoración por parte de la Concejalía de Medio Ambiente; aquellas viables y oportunas se integrarán en el borrador
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Cualquiera que, en alguna ocasión, se haya enfrentado al desafío de trazar una planificación y, después, ejecutarla se habrá percatado de que todo plan, para ser exitoso, debe entenderse como un elemento vivo, cambiante, adaptable a las variables circunstancias del entorno. Ya lo decía el célebre mariscal alemán Erwin Rommel… «Ningún plan resiste en contacto con el enemigo«. Por eso, en la Concejalía de Medio Ambiente de Gijón continúan enfrascados en modificar, enriquecer y malear el Plan Municipal de Residuos Cero 2025-2030, el ambicioso documento que hará las veces de cable guía a vecinos, instituciones y negocios durante los próximos cinco años. Y esta misma mañana, en el marco de la reunión del Consejo Local de Prevención de Residuos, el edil del área, Rodrigo Pintueles, ha presentado las 54 ideas propuestas por hasta once organizaciones locales, con el fin de que sean añadidas al borrador. Un amplio abanico de aportaciones que, en estos momentos, están siendo estudiadas.
La confianza del Consistorio es que, en el plazo de un mes, esas propuestas hayan sido debidamente analizadas, y se pueda hacer público un nuevo borrador que las incluya. A partir de ese momento, el pliego resultante pasará a tramitación municipal, algo que, si los tiempos de la burocracia no se dilatan en demasía, podría suceder antes del verano. Y, aunque el contenido de las ideas compartidas hoy no ha trascendido, Pintueles sí ha asegurado que, en último término, «estamos elaborando de forma consensuada y dialogada, contando con todos grupos municipales, los agentes económicos y también con la participación vecinal, en definitiva, con el conjunto de la ciudadanía, es la clave para que la Gijón cumpla con esos objetivos y con la ley desde la implicación de todos los gijoneses». Algo para lo que, «es necesario tomar decisiones valientes, y articular nuevas estrategias».