El edil Rodrigo Pintueles afirma que desde el Principado «nos han informado muy escuetamente de que se iniciaba el trámite» para la construcción de la industria que la mexicana PRECO explotará en El Musel
No parece que existan fisuras en la línea defensiva del Gobierno de Gijón contra la construcción de la planta de pirólisis en suelo de El Musel. Si, a primera hora de la mañana de este martes, el portavoz municipal Jesús Martínez Salvador, de Foro, aseguraba que desde el Consistorio se hará lo posible para que dicha industria «no sea una realidad», poco después de sumaba a sus palabras Rodrigo Pintueles, del PP y, en la actualidad, concejal de Medio Ambiente y Sostenibilidad. Y lo hacía al término de la Comisión de Seguimiento de Calidad del Aire de la ciudad, en la que la representación del Principado, ha asegurado el edil, «nos ha informado muy escuetamente de que se iniciaba el trámite del expediente relativo a la instalación, y que en breve recibiremos una solicitud de consultas para que traslademos las alegaciones que consideremos oportunas». A la espera de que llegue ese momento, Pintueles ha sido tan tajante como Martínez Salvador: «Si en, contra de lo que venía manifestando la empresa PRECO de que sería limpia y sin quema, encontramos que supondrá incineración e incremento de los inaceptables niveles de contaminación que sufre la zona oeste, no dudaremos en rechazarla».
La decisión, no obstante, deberá esperar a que se desvelen más detalles sobre el particular. «Creemos que es necesario conocer y estudiar la totalidad del proyecto», ha matizado el responsable gijonés de Medio Ambiente. Eso sí, ha recalcado que, en último término la decisión está en manos del Gobierno autonómico, que será el que decidirá si, a pesar de la fuerte oposición política y vecinal, esta última encabezada por la Federación de Asociaciones de Vecinos (FAV), la pretensión de edificar y poner en marcha la planta sale adelante.
Al margen del Ejecutivo local, desde la oposición también han llegado las primeras reacciones. En concreto, la edil de Podemos, Olaya Suárez, no ha dudado en sentenciar que el que el equipo del presidente asturiano, Adrián Barbón, «siga adelante con la tramitación de esta aberración es una muestra de su nula conciencia climática y ambiental, y de que le importamos muy poco los vecinos de la zona oeste de Xixón. Que se considere que tiene un ‘efecto ambiental positivo’ quemar plásticos, y destinar parte de ellos a que se quemen de nuevo como combustibles, es un insulto a la inteligencia. La reducción de las emisiones tiene que pasar por la reducción de los plásticos, no por seguir girando la rueda de producción, consumo y quema».