La vuelta a la jornada reducida era una de las demandas del profesorado, pero no la única. Barbón calificaba este miércoles la protesta de “contundente y masiva”

El presidente del Principado de Asturias, Adrián Barbón, ha anunciado este miércoles en el Pleno de la Junta General que el Gobierno autonómico suspenderá la aplicación de la reducción de la jornada escolar reducida en los meses de junio y septiembre. La medida llega en un momento de alta tensión con el sector educativo, que este martes protagonizó en Oviedo una jornada de movilizaciones que los sindicatos califican de “histórica”. Barbón ha explicado que, a pesar de la suspensión de la reducción horaria, el Ejecutivo facilitará el funcionamiento de los comedores escolares dependientes del Principado. En su intervención ha respondido a una pregunta formulada por la portavoz de Vox, Sara Álvarez Rouco, y expresó su respeto a las protestas del personal docente, destacando que la movilización fue “contundente y masiva”. Ha insistido también en que el objetivo del Gobierno es “favorecer el diálogo” y “reforzar la educación pública”.
La medida anunciada coincide con el inicio de una huelga indefinida convocada por el sindicato CSIF y con una doble movilización en la capital asturiana a la que se sumaron miles de docentes de todas las etapas educativas. A lo largo del día, se sucedieron dos concentraciones en la Plaza de España, una por la mañana y otra por la tarde, convocadas por diferentes organizaciones sindicales, entre ellas CCOO, UGT y SUATEA.
Durante las protestas, el profesorado expresó su malestar por lo que consideran una pérdida progresiva de derechos laborales y una falta de diálogo por parte de la Consejería de Educación, encabezada por Lydia Espina. El acto incluyó la lectura de un manifiesto en el que se denunciaron, entre otros puntos, la eliminación unilateral de la jornada reducida en los meses de calor, el deterioro de las condiciones laborales, el abuso de los servicios mínimos durante las huelgas, y una gestión que califican de “autoritaria” y “deslegitimadora”. Las demandas del colectivo docente incluyen la homologación salarial con otras comunidades autónomas, la reducción efectiva de ratios, la aplicación de la reducción horaria para mayores de 55 años, un nuevo acuerdo de plantillas que garantice estabilidad, el reconocimiento de tareas pedagógicas dentro del horario laboral, y un compromiso claro con la escuela pública frente a la externalización de servicios.
Los representantes sindicales también criticaron que, en las negociaciones recientes, la Consejería no había presentado propuestas concretas, y advirtieron de que, si no se producen avances, las protestas se intensificarán. Borja Llorente, secretario general de Enseñanza de CCOO Asturias, advirtió que la movilización “es solo una pequeña muestra de lo que puede pasar” si no se atienden las reivindicaciones del sector.