El galardón reconoce la fusión de tradición familiar y cocina de vanguardia que caracteriza al establecimiento

El Restaurante V. Crespo, uno de los grandes referentes de la cocina gijonesa, ha sido distinguido con el Premio Nacional de Gastronomía Plato de Oro, otorgado por el Comité Nacional de Radio Turismo. El reconocimiento se hará oficial el próximo 30 de septiembre de 2025 en un acto que tendrá lugar en el Hotel Alfonso XIII de Cartagena, con una gala que contará con la participación del restaurante Magoga, poseedor de una Estrella Michelin.
Fundado en 1994 por Vicente Crespo, el Restaurante V. Crespo abrió sus puertas con la vocación de ofrecer una cocina de calidad, basada en el mejor producto de cada temporada. Con un interior marinero, cálido y cuidado en cada detalle, el local ha sabido mantener durante más de tres décadas una identidad propia en constante renovación.
Actualmente, el negocio está liderado por Marcos Crespo, hijo de Vicente, junto con el chef Jesús González, incorporado en 2015. Una combinación generacional que permite mantener el toque familiar sin renunciar a la innovación y la creatividad en cada plato.
La propuesta gastronómica de V. Crespo se distingue por su versatilidad, con especial protagonismo para los pescados y los arroces, además de una bodega con más de 200 referencias nacionales e internacionales, en la que también destacan los vinos asturianos y nuevas expresiones de sidra.
El relevo generacional ha consolidado una doble apuesta: mientras Vicente explora nuevos formatos y conceptos en su trayectoria personal, Marcos se mantiene fiel a la esencia del restaurante, garantizando un servicio elegante, eficaz y abundante en las raciones. Una filosofía que, en palabras de sus clientes, demuestra que la modernidad también puede ir de la mano del “fartucarse” sin perder calidad.
Crespo, leonés de crianza y gijonés de adopción, ha sido siempre capaz de combinar la tradición y la vanguardia en los fogones, preparando con la misma naturalidad un botillo berciano que unos oricios asturianos, o una merluza guisada que una trucha escabechada. Hoy, ese legado continúa en manos de Marcos, encargado de proyectar y proteger una herencia culinaria que ya ha alcanzado reconocimiento nacional con este prestigioso galardón.