La medida, tradicional cada año por estas fechas, coincide con la celebración de la FIDMA, pues parte del espacio es utilizado durante el evento; hasta fin de mes pueden utilizarse los ubicados en Roces, La Calzada y Tremañes
Es cuestión de horas, poco más de veinticuatro para ser precisos, que Gijón, como el Principado en pleno, dé la bienvenida en la tarde de este viernes a una nueva edición de la Feria Internacional de Muestras de Asturias (FIDMA). Un tiempo escueto, cierto es, que las Administraciones públicas están aprovechando para realizar los últimos preparativos que les corresponden. Y uno de ellos ha sido la ya tradicional clausura del ‘punto limpio’ situado en Somió; la Empresa Municipal de Servicios de Medio Ambiente de Gijón (EMULSA) lo mantendrá cerrado desde este jueves hasta el 31 de agosto, momento en que retomará la actividad. ¿La razón? Sencilla: mientras dure la FIDMA una parte de su espacio será aprovechado por dicho evento.
Hasta entonces, los vecinos de la ciudad pueden recurrir a cualquiera de los otros tres ‘puntos limpios’ operativos en el concejo. El primero de ellos, el de Roces, es accesible de lunes a viernes de 8.15 a 20 horas, y los sábados, de 8.15 a 13.30, mientras que el de Tremañes puede emplearse entre las 8.15 y las 21 horas de lunes a viernes, y entre las 10.15 y las 16.45 los sábados. Finalmente, el que abrirá sus puertas de forma más escueta será el ‘punto limpio’ de La Calzada, que estará en servicio de lunes a viernes, desde las 8.15 hasta las 14 y desde las 16 hasta las 19.30 horas, y los sábados, de 10 a 14.30 horas. Toda la información puede consultarse aquí.
En 2023 los cuatro ‘puntos limpios’ de Gijón recibieron 17.658 toneladas de residuos, un 11% por ciento menos que en 2022. El 60% se depositaron en Roces, el 25% en Tremañes, el 11 en Somió y el resto en La Calzada En el espacio ReusApp, ubicado en el ‘punto limpio’ de Roces como zona de intercambio ciudadano de productos destinados a la reutilización, desde su puesta en marcha en 2018, se han recuperado 7.586 objetos que suponen 39 toneladas menos de residuos, que hubieran acabado en el vertedero.