La organización sindical amenaza con movilizaciones si el gobierno autonómico no aborda la cuestión de las altas temperaturas en edificios administrativos, un problema «muy grave»
La muerte por golpes de calor el verano pasado de dos operarios del Ayuntamiento de Madrid que trabajaban a pleno sol parece haber concienciado a la sociedad de acotar las condiciones laborales para adaptarla a un mal que, con toda probabilidad, ha venido para quedarse. Sin embargo, tales medidas parecen no haberse materializado en los edificios del Principado; según denuncia la Coordinadora Sindical Independiente y de Funcionarios (CSIF), en algunas áreas de trabajo dependientes del gobierno autonómico «se están superando los treinta grados», algo que, a su juicio, el ejecutivo de Adrián Barbón no puede seguir permitiendo.
Desde la entidad sindical inciden en que en centros como el Instituto Asturiano de Administración Pública Adolfo Posada, o el complejo Calatrava, la situación se ha vuelto «muy grave». La reclamación no es nueva; ya a inicios del verano de 2022 se presentaron varias quejas en ese sentido, sin éxito hasta el momento. Y eso ha colmado la paciencia de los integrantes de CSIF, que ya han alertado de que «el siguiente paso que nos queda es la movilización, por lo que vamos a plantear la convocatoria de concentraciones periódicas a pie del Edificio Administrativo de Servicios Múltiples del Principado (EASMU) hasta que no se solucione el problema de las temperaturas».