Janel Cuesta recibió el “I Dionisio de Honor” además de una acuarela del pintor Valentín del Fresno
¿Quién no ha soñado alguna vez con tener una casa de ensueño? Para algunas personas la sobriedad y minimalismo primaría en todas las estancias. Para otras, en cambio, las piezas antiguas, conseguidas en rastrillos o en subastas exclusivas, serían las apropiadas a su estilo. Incluso con un cambio en la iluminación se lograría un efecto diferente. Sin lugar a dudas, los que mejor pueden aconsejar a quien ha tomado la decisión de vivir en un espacio único, son los diseñadores y decoradores de interior.
Buena parte de este colectivo, el del Colegio Oficial de Diseñadores de Interiores/Decoradores de Asturias (CODIDAS), se reunió hace unos días en la Biblioteca Pública Jovellanos de Gijón. El acto no pudo tener mejores maestras de ceremonias. Así pues, abrieron encuentro su decana, Luz Huerga y la vicedecana, Laura Sola Soria.
Uno de los temas tratados y que preocupa en gran medida al sector es el intrusismo profesional y con él, el desconocimiento no solo a nivel de usuario, sino también de administraciones y ayuntamientos. Y es que los proyectos técnicos deben de ser realizados por profesionales colegiados que estén al tanto de las novedades tanto en tendencia como en materiales. Festejaron la buena acogida de su programa con un brindis por los muchos proyectos venideros.
No faltaron Alejandro Caamaño o Carlos Botas, entre otros.
En el otro extremo de la ciudad, en la Guía, el escritor y cronista Janel Cuesta, fue sorprendido con un pequeño homenaje.
La asociación Amigos de Dionisio Huerta quiso brindarle reconocimiento en una de sus muchas reuniones anuales. La periodista Esther Canteli tuvo unas emotivas palabras para Cuesta, que recibió el “I Dionisio de Honor” además de una acuarela del pintor Valentín del Fresno y una llamada sorpresa del presidente de honor de la asociación, Pachi Perurena, que no pudo asistir. Tortilla, chorizos y sidra sellaron la jornada.