El cabeza de lista del PSOE en Gijón exige «coherencia» a la líder de Foro y pide «un mínimo de transparencia» a las fuerzas de la derecha sobre sus negociaciones
Una semana y media después de la amarga victoria en votos lograda por el PSOE gijonés el 28 de mayo, en unos comicios que le otorgaron un triunfo numérico insuficiente para formar gobierno, sus cuadros parecen haber asimilado que, muy probablemente, no ostentarán el poder local durante los próximos cuatro años. Por ello, el cabeza de lista de los socialistas, Luis Manuel Flórez, ‘Floro’, junto con el secretario general de la Agrupación Socialista Gijonesa, Monchu García, exigieron ayer a la líder de Foro, Carmen Moriyón, que sea clara en lo referente a una posible negociación con Vox para acceder al ejecutivo. Y es que, en término puramente matemáticos, los ocho concejales obtenidos por los de Moriyón, sumados a los cinco del PP, no bastarían por sí solos para llegar a la alcaldía; habría que reforzarlos con los de Vox.
Ante semejante posibilidad, ‘Floro’ retó ayer a su homóloga de Foro y, a la sazón, presidenta de dicho partido. «Moriyón plantea públicamente que no va a gobernar con Vox, pero si quiere gobernar en Gijón necesita el apoyo de Vox. ¿En qué quedamos», planteó el candidato, poco antes de participar en una asamblea extraordinaria para votar a los integrantes de las listas al Congreso y al Senado que concurrirán a las generales del 23 de julio. Así, exigió a las fuerzas de la derecha «un mínimo de transparencia» sobre sus negociaciones. «Creo que los ciudadanos esperan de sus políticos verdades y coherencias, y no confusionismos».
Para ‘Floro’, tanto Vox como el PP están pidiendo espacio para sostener y formar parte de un gobierno «liderado por un partido que ni es partido, ni tiene proyecto». A su modo de ver, se trata de una cuestión «absolutamente personal, que se basa en una persona concreta, Carmen Moriyón, sin la cual ni existiría la organización, porque la debilidad es absoluta. Están al borde de la desaparición, no tienen estructura». De hecho, aún hoy, tantos días después de las elecciones, al socialista le llama la atención que tras saberse los resultados se puso «en contacto con los candidatos del resto de partidos con representación en el Ayuntamiento», y con la única que no pudo contactar fue con Moriyón. «Será cosa del talante, pero no lo sé», teorizó. Y, frente a ello, aseguró que él ofrecerá siempre un talante «abierto, cercano, dialogante», y que buscará «lo mejor para Gijón».
Frente a tales declaraciones Monchu García matizó que él sí sostuvo una conservación «protocolaria» con el presidente de Foro Asturias en Gijón, Jesús Martínez Salvador, a su vez portavoz municipal. Ahora bien, recalcó que lo que se necesita es «que hablen entre los candidatos que se presentaron». Eso sí, respecto a Vox planteó que «es una fuerza que se sirve del sistema democrático para dañarlo», un modelo que el PSOE no comparte. Es más, si bien diferenció entre el respeto institucional y negociar con Vox, también incidió en su convicción de la necesidad de tender un ‘cordón sanitario’ frente a posibles pactos con el partido de extrema derecha.
El dirigente local socialista concluyó poniendo el foco en que el PSOE tiene un proyecto «que está avalado por la mayoría», y una suma de voto alternativa, de tres proyectos «pero en el mismo espectro ideológico». De cerrar acuerdo la derecha, se pondrá de manifiesto la «falsedad» con la que se ha dirigido a los votantes a ser alternativa al PSOE.