Los sindicatos protestan ante Hugo Morán, quien acudió a la Facultad de Derecho de la Universidad de Oviedo para una conferencia

Recibimiento hostil en Oviedo para Hugo Morán, secretario de Estado de Medio Ambiente, por la polémica en torno al lobo en el medio rural. Llegó a gritos de «traidor» por parte de los representantes de los sindicatos Asaja, Coag y UCA a la Facultad de Derecho de la Universidad de Oviedo para participar a la conferencia ‘El cambio climático: reto para Asturias del siglo XXI’. Los pitos y cencerros caldeaban el ambiente, que el propio Morán trató de relajar acercándose a ellos. En ese momento les invitó a mantener un diálogo sosegado a la salida de la conferencia, aunque muchos de los ganaderos desconfiaron de su palabra argumentando que su avión saldría a primera hora de la tarde y que no tendría luego tiempo para hablar. «Es un traidor y es lamentable que ni siquiera de la cara después de que el lobo esté acabando con nuestro ganado», clamaban.
El propio Morán ha calificado las protestas como «normales» en un estado de derecho. «En democracia todo el mundo tiene derecho a defender sus intereses y sus puntos de vista y es normal que utilicen los medios que tienen a su alcance», ha defendido. En ese sentido, ha insistido este viernes en que España debe de homologarse al resto de países de la Unión Europea (UE) y aplicar la directiva de convivencia de la biodiversidad con las actividades que se desarrollan en el medio rural con respecto al lobo. «Vivimos en un estado de derecho que forma parte de una estructura de cooperación internacional que es la región europea y solo quedan dos estados que son Bulgaria y Letonia» sin incluir al carnívoro en el listado de especies de protección especial, ha señalado. La nueva estrategia estatal, que desde el pasado mes de septiembre incluye al lobo en el Listado de Especies de Protección Especial (Lespre), obliga al Principado a bloquear su gestión autonómica, que contemplaba abatir 32 ejemplares en el próximo año y medio.
Mesa de trabajo
Aún así, Morán después de defender la homologación al resto de países de la UE en la defensa del lobo, no ha descartado la posibilidad de llegar a un acuerdo entre las comunidades autónomas afectadas y el Gobierno de España «pero que mantenga un equilibrio razonable entre la protección de la especie y la protección de las actividades en el medio rural». A pesar de que el Principado (junto a Galicia, Cantabria y Castilla y León) constituyesen un grupo de trabajo propio sobre la gestión de la especie y anunciase que abandonaba el estatal, Morán no ha dudado de que Asturias continuará acudiendo a las reuniones del ministerio sobre la conservación del lobo.