El Ayuntamiento ve difícil adoptar posturas positivas cuando la definición del proyecto lleva meses sin avances; «se está demorando más de lo necesario», lamentan en el equipo de Gobierno local

¿Qué tendrá Gijón, al fin, para compensar la pérdida del comprometido vial de Jove, de la que este viernes se cumplirá un año, y para sacar el tráfico pesado de la avenida Príncipe de Asturias de una vez por todas? ¿Una salida por Aboño? ¿Una simple humanización del trazado actual? O, quizá… ¿Nada? Es difícil vaticinarlo; poca es la información que ha trascendido desde el Ministerio de Transportes, organismo competente en la materia. Y esa falta de datos, unida al largo tiempo transcurrido desde que se descartase el proyecto, han llevado al Ayuntamiento de Gijón a confesarse poco esperanzado de cara a la presentación de una alternativa. Ya lo dijo ayer martes el portavoz municipal, Jesús Martínez Salvador, al término de la Junta de Gobierno Local: hoy por hoy, es «imposible» conservar una «positiva y optimista» sobre el particular.
Durante su comparecencia ante lo medio, el edil forista ahondó aún más en esa aseveración, planteada tras saberse que, en respuesta a la pregunta planteada por el diputado de Foro Adrián Pumares en la última Comisión de Movilidad, Medio Ambiente y Gestión de Emergencia del Principado, el consejero de Movilidad, Medio Ambiente y Gestión de Emergencias, Alejandro Calvo, alertó de que tanto el desdoblamiento de la GJ-10 entre Lloreda y Veriña, como la humanización de Príncipe de Asturias, «no pueden esperar más». En ese sentido, Calvo prometió que el Ejecutivo asturiano está en posición de «exigir» al nacional que ejecute ambas acciones. Sin embargo, en el Consistorio gijonés no lo tienen tan claro… «Se está demorando más de lo necesario«, incidió Martínez Salvador, no sin antes detallar que por la avenida pasan a diario alrededor de 1.500 camiones.
A la vista de lo anterior, no sorprende que en Gijón no haya voluntad de modificar tan pesimista postura hasta que se tomen medidas activas para paliar lo que, a juicio del portavoz municipal, no fue sino un «fiasco» e, incluso, un «engaño electoral«. No obstante, adelantó que no se convocará el Consejo Social hasta que haya novedades sólidas al respecto.