La concejala de seguridad ciudadana y emergencias, Nuria Bravo, destacó el buen hacer del equipo de salvamentos, que cerró una larga temporada de baños sin lamentar ningún fallecimiento
Este martes se cerraba oficialmente la temporada de baños en las playas de Gijón, la más larga hasta el momento, ya que este año dio comenzó el pasaso mes de mayo y se alargó hasta la mitad de este mes de octubre. Y lo hizo, por primera vez en cinco años, sin tener que lamentar víctimas mortales en los arenales. Para celebrarlo, y en un acto cargado de simbolismo, el equipo de salvamento marítimo colocó en la tarde de este martes el tradicional ramo de laurel en lo alto de la escalera 12. Y es que este año, la cuidad ha logrado lo propuesto, al no tener que registrar ningún fallecimiento en las playas, un hecho que no sucedía desde 2019. No quiere decir ello que los equipos de salvamento no hayan tenido que emplearse al máximo, ya que se cuantificaron casi 5.000 (4.961) intervenciones a lo largo de la temporada.
Nuria Bravo, concejala de seguridad ciudadana y emergencias, expresó así su satisfacción durante el acto: «El balance es francamente positivo. Estamos satisfechas y, personalmente, muy orgullosa. Sin ninguna víctima mortal, lo cual no se puede decir todos los años. Gracias al trabajo en equipo todo ha funcionado correctamente. Prometimos que queríamos los arenales más seguros del Cantábrico, y lo estamos consiguiendo. Seguiremos trabajando año tras año».