América fue clave en el desarrollo del fútbol profesional en nuestra tierra
El profesionalismo de los futbolistas asturianos va íntimamente ligado a los clubes fundados por las comunidades asturianas en América. Cuba, muy especialmente, y México atrajeron a jugadores para correr la aventura de hacer las Américas viviendo del deporte. El primero en hacerlo, el primer futbolista profesional asturiano fue José Antonio de la Riera Acebal, “Pepito Riera”, nacido en Gijón en 1890 y hermano de uno de los fundadores del Sporting, Corsino de la Riera. Era una persona de una familia acomodada. Hijo del conocido empresario naval Gervasio de la Riera Morán, propietario de los Astilleros Riera y, por tanto, no precisaba del deporte profesional para vivir. Fue jugador del Sporting entre 1916 y 1920, cuando en ese año recibió una oferta para jugar en el Club Fortuna de La Habana por una temporada, la 1920-21, y la aceptó. De ahí se fue, también como jugador profesional al Asturias de México, donde estuvo otro año y al Club Inglés Rovers de Guatemala, viviendo allí su última temporada en América.
A su regreso a Asturias, volvió al amateurismo, reincorporándose al Sporting en la temporada 1923-24, a la vez que trabajaba en el astillero familiar. Después del verano de 1924 dejó definitivamente el fútbol. Tras él vinieron otros tres futbolistas gijoneses, Fernando, Casielles y Ferrerín, jugadores del Fortuna de Ceares, que encontraron en Cuba una oportunidad de dedicarse al mundo del fútbol como profesionales en el Juventud Asturiana de La Habana en el año 1924.
“Ferrerín”, cuyo nombre real era Arcadio Díaz Cortina, tras dos temporadas en Cuba, regresó a Asturias y, como le sucedió a Pepito Riera, eso supuso su vuelta al fútbol amateur. Aunque en su caso por poco tiempo. Un año más tarde fue fichado por el Sporting en calidad de futbolista profesional y jugó en el club rojiblanco las temporadas 1927-28 y 1928-29. Tras finalizar su contrato, por motivos laborales, se trasladó a Logroño, y en la capital riojana jugó en el Club Deportivo Logroño, antecesor del mítico Club Deportivo Logroñés. América fue, pues, clave en el desarrollo del fútbol profesional en nuestra tierra.