770 días después, los alumnos volvieron a ocupar las aulas del Colegio Público Rey Pelayo, afectado por el derrumbe de un aula de Infantil en horario nocturno en enero de 2023, lo que obligó a escolares y maestros a completar los cursos en otros centros de la ciudad
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La hora de comienzo de la jornada estaba marcado, como siempre, a las 9 horas, pero desde mucho antes ya se respiraba por la zona que el de hoy era un día diferente. Los escaparates de los bares mostraban carteles celebrando el regreso y la puerta del centro estaba decorada con globos y un gran ‘Bienvenidos/as’. «Fueron todos puntales como nunca. A menos 10 estaban todos allí», rememora Pilar Álvarez Iglesias, directora del Colegio Público Rey Pelayo, que reabría sus puertas después de dos años y un mes cerrado después del fin de las obras de sustitución y reparación de los forjados de la planta baja por el derrumbe producido en un aula de Infantil el 12 de enero de 2023.
«Ya tocaba después de 770 días»contabiliza la responsable del centro, que lleva, junto a todo su equipo docente, unas jornadas frenéticas para que todo estuviera preparado para hoy. El confeti acompañó la entrada del centenar de alumnos que siguen en el colegio y que, hasta ahora, recibían clases en La Escuelona y El Llano, con carteles de bienvenida también en el lugar. Y junto a ellos 4 nuevos que se matricularon al conocerse el regreso al Rey Pelayo. «Mañana habrá otros 3 más y hay gente que ya está preguntando por el curso que viene. La gente quiere estar en el cole y tenemos las puertas abiertas y muchas ganas de volver a trabajar», celebra.
La fiesta no se alargó mucho. «A las 10 nos pusimos con las clases normales porque hoy había 3 excursiones, de hecho están dos grupos en FETEN”, apunta la directora, que destaca que “está todo el mundo muy contento. Vas por el cole y ves felicidad». «No sé explicarlo bien. Es como cuando llegas a casa de un viaje, que te lo has pasado muy bien, ha estado genial, y te sientas en tu sofá… Es tu casa. Es la sensación que tenemos todos. Es felicidad. Ves a todo el mundo que está cansado, pero sonriente, y que los nenos van como flotando. Es una sensación especial”, añade.
Visita institucional
La primera jornada del renovado Rey Pelayo contó con la visita de la consejera de Educación, Lydia Espina, y de la alcaldesa Carmen Moriyón y el concejal de Infraestructuras Urbanas y Rurales, Gilberto Villoria, que compartieron momentos con los alumnos. La socialista calificó el día como «muy emotivo”, al que se llega después de «mucho trabajo» coordinado entre el Gobierno de Asturias y el Ayuntamiento. «Ahora es el momento de darle toda la fuerza y todo el empaque para que el alumnado de la zona vuelva a venir aquí», expresó.
Por parte del Ayuntamiento, Villoria declaró que estas semanas fueron «intensas» para poder reabrir el colegio antes del tiempo previsto, con el Antroxu como horizonte temporal. «Es un buen día», festejó al tiempo que recordó que en verano se va a poner en marcha la segunda parte de las obras, en las que se reforzará el forjado de la primera planta.