La Policía Nacional ha detenido a un hombre de 63 años como presunto autor del delito, y ha intervenido más de un kilo de diversas sustancias, dinero en metálico y balanzas de precisión para el pesado de los estupefacientes
Nuevo triunfo de las autoridades en su perpetua guerra contra el narcotráfico. Agentes de la Policía Nacional destacados en Gijón detenían la pasada semana a un hombre de 63 años, de nacionalidad extranjera y con domicilio en la ciudad desde hace largo tiempo, por su presunta relación con un entramado de venta de estupefacientes que, si las pruebas obtenidas se revelan ciertas, se ubicaba en el barrio de La Arena. El sujeto en cuestión ya puesto a disposición judicial, se encuentra en prisión con carácter provisional; así, con su salida de las calles, se da por desmantelado un importante ‘punto negro’ de venta de droga al menudeo en la urbe asturiana.
Tal como han confirmado fuentes policiales oficiales, fueron los propios vecinos de la zona los que dieron la alerta, inquietos por la actividad del ahora arrestado. Y es que, tal como pudieron averiguar los agentes en el transcurso de la investigación, el individuo distribuía las sustancias a distintas horas del día y en diversas calles del barrio, citándose previamente con los compradores tanto en la vía pública, como en negocios hosteleros. Por si fuese poco, contaba con antecedentes por delitos similares, y en la misma zona, cometidos años atrás, por lo que a la Policía Nacional no le costó obtener una orden judicial para registrar su domicilio. Allí, los uniformados encontraron 1.159 gramos de hachís, otros setenta de cocaína en roca, 9.030 euros y una balanza digital de precisión.
