La plataforma repite las críticas del año pasado contra una fórmula «innecesaria en una ciudad con la rica oferta hostelera que tiene Gijón», y añade a ellas el «absurdo» de extenderla a una zona tan tensionada turísticamente como el ‘barrio alto’

Cimavilla no está sola en su cruzada contra el Ayuntamiento de Gijón… O, mejor dicho, si se ajusta el tiro, contra Divertia y su idea de expandir las casetas del ‘Paseo Gastro’ a la calle Claudio Alvargonzález. La idea, si bien no ha sido ampliada en los nueve días que han transcurrido desde su presentación, ha puesto en alerta a los vecinos del ‘barrio alto’, preocupados por lo lesiva que pueda ser en la que es, de por sí, una de las zonas más tensionadas por la constante y creciente afluencia de turistas. Y a esa batalla, que podría desembocar en movilizaciones si el Gobierno local no recula, se ha sumado la plataforma Hostelería Con Conciencia (HCC). A través de publicaciones en las redes sociales, y en repuesta a preguntas formuladas por este periódico, sus responsables han confirmado su apoyo incondicional a los habitantes de Cimavilla, tanto por el daño que un ‘Paseo Gastro’ extendido podría causar a dicho espacio como, ampliando el foco al conjunto de la ciudad, por lo contraproducente que puede ser para un tejido hostelero y de restauración tan rico, variado y consolidado como el que la urbe exhibe todo el año.
«En una zona como ‘Cimata’, en la que abundan los bares y los restaurantes, el modelo del ‘Paseo Gastro’, simplemente, sobra«, sentencia Félix Marcos, presidente de HCC, dando voz al sentir de un colectivo, el de hosteleros, en el que no escasean representantes de esos negocios ubicados en el ‘barrio alto’. Los mismos que, si se cumple la previsión de Divertia, podrían ver amenazada su expectativa de beneficio en agosto, precisamente el mes más rentable del año. Un gesto que, a juicio de Marcos, «demuestra una total falta de sensibilidad hacia los locales asentados en la ciudad a la que dicen representar«. Porque, advierte, colocar las casetas en Claudio Alvargonzález hará que se repitan «las escenas esperpénticas que ya vimos el año pasado en Begoña: orines, basura, los productos de cualquier manera… En realidad, aquello fue un ‘Cutre Gastro’ en toda regla y, ahora, por si no fuera suficiente, quieren llevarlo a otra zona de Gijón«. La reflexión del presidente de HCC ante eso es clara: «no es justo; ningún barrio se merece eso«.
Claro, que la inquietud de Marcos trasciende el plano vecinal. Como se ha mencionado en el párrafo anterior, tanto entre los hosteleros integrados en la plataforma, como entre aquellos ajenos a ella, abunda la preocupación por la competencia, no totalmente leal, que el ‘Paseo Gastro’, tal como se concibió en su edición inaugural de 2024, podría ejercer. «Al final, de lo que hablamos es de empresas privadas externas que se van a llevar los beneficios disfrutando del uso de suelos públicos en plena temporada estival«, protesta el aludido. Claro, habrá quien pueda contraargumentar afirmando que el Consistorio aún no ha hecho públicas las condiciones del pliego, pero en la memoria colectiva pervive el «oscurantismo» que rodeó la edición previa, y que desató una marea de críticas desde los partidos en la oposición. Todo ello, prosiguen en HCC, mientras «nosotros, los chigres de siempre, seguimos pagando nuestras tasas, como la de terraza… Que, encima, aumentan en agosto; no es jugar limpio«. De ahí que Marcos concluya su manifestación de respaldo a Cimavilla, y a la hostelería cautiva de Gijón, con un llamamiento a la coherencia y al tacto. «Nuestra ciudad tiene muchos negocios en todos sus barrios. ¿Por qué no invertir en potenciarlos, en darles más visibilidad para el disfrute, en vez de sobrecargar la oferta? Es innecesario«.