Según la Guardia Civil, el 14 de octubre el transportista habría estrellado su vehículo contra un turismo detenido en uno de los carriles de la ‘Autovía Industrial’; la ocupante de este último, que se encontraba dentro, falleció en el choque
El pasado 14 de octubre, hace apenas un mes y medio, las carreteras asturianas volvían a acaparar titulares a consecuencia de una nueva tragedia sobre su asfalto. Ese día, alrededor de la una de la tarde, un camión que circulaba por la AS-II, la conocida como ‘Autovía Industrial’, en dirección a Oviedo se llevaba por delante a un turismo que permanecía detenido en uno de los carriles, a la altura del punto kilométrico 15. La mala suerte quiso que, en el momento del choque, la conductora del coche se hallase dentro; atrapada entre el amasijo de hierros y herida grave, fue trasladada a bordo de una UVI móvil al Hospital Universitario Central de Asturias (HUCA), donde falleció sin que los médicos pudiesen hacer nada por evitarlo. Un suceso por el que la Guardia Civil está investigando al transportistas, un corverano de 44 años, sobre el pesa la posible acusación de homicidio por imprudencia.
Según ha podido certificar el Equipo de Investigación de Siniestros (EIS) de la Unidad de Investigación de Seguridad Vial (UNIS) de la Benemérita, la colisión se produjo «en un tramo recto y de buena visibilidad, con un perfil ascendente». Detalles todos trascendentales para los agentes, de cuya primera inspección ocular, hecha el día de la tragedia, pudieron determinar la posible causa del siniestro, y establecer la presunta responsabilidad penal del conductor investigado. Posteriormente, el análisis de la dinámica del accidente, la morfología de los daños sufridos por el turismo y, fundamental, el contenido de las grabaciones hechas por la cámaras de control de tráfico reforzaron lo anterior. En consecuencia, las diligencias instruidas fueron remitidas al juzgado de instrucción de Gijón, en funciones de guardia. El asunto, por tanto, está ahora en manos de la justicia, con el error humano como razón más probable del desgraciado incidente.
De hecho, el Sector de Tráfico de Asturias, adscrito a la Guardia Civil, recuerda que las distracciones al volante «son una de las principales causas que provocan accidentes en carretera». Por ello, se recomienda evitar conducir en estado de fatiga o somnolencia, y abstenerse de utilizar el teléfono móvil u otros dispositivos mientras se ejerce la conducción de vehículos.