La propuesta contempla convertir espacios de la ciudad actualmente en desuso en área que presten servicio a autónomos, microempresas y trabajadores en remoto

Cada vez son más los candidatos a la alcaldía de Gijón que han visto en los depósitos de agua en desuso de Roces una baza electoral digna de ser aprovechada. El último en sumarse a esa tendencia ha sido el aspirante de IU-Más País-IAS, Javier Suárez Llana, quien ayer manifestó su voluntad de incluir ambos equipamientos en su plan para habilitar espacios sin uso de la ciudad en una suerte de «antenas» de la prevista ampliación de la Milla del Conocimiento. Se trataría, en esencia, de transformarlos en lugares singulares que den servicio a autónomos, microempresas y trabajadores en remoto.
«Es el momento de apostar por el sector tecnológico como motor para el desarrollo económico y la creación de empleo de calidad en la ciudad», aseguró Suárez, quien es firme partidario de «generar un modelo de residencia empresarial que se diferencie por su singularidad y los servicios que oferta, y que sirva como un elemento más dentro de una estrategia para la captación de talento en la ciudad». En este sentido, la opción de los depósitos de Roces se postula como la fórmula para, a la vez que se ponen sobre la mesa esos servicios a emprendedores, devolver una utilidad empírica a una parte del patrimonio arquitectónico local. «No sólo necesitamos descentralizar servicios; también hay que llevar a los barrios proyectos generadores de actividad económica y empleo, especialmente a los del sur y el oeste de la ciudad», concluyó.