El periodista asturiano sorprende al jurado con su mar y montaña ‘Paraíso Natural’: «Es en honor a Asturias»
Los fogones de MasterChef Celebrity cada vez se parecen más a un estudio de radio para Juanma Castaño. El periodista gijonés ya se desenvuelve ante los fogones casi como lo hace delante del micrófono de la COPE. Cocina, tranquilo, sonríe, gasta bromas de todo tipo… Y lo más importante, le ha plantado su conocida maleta negra a Miki Nadal. No lo ha hecho físicamente, pero sí virtualmente. El comunicador vio este lunes cómo su ‘enemigo’ se iba para casa junto a Terelu Campos. Dos eliminados en una noche en la que Juanma tuvo que sudar en la prueba de eliminación para quedarse. Fue el mejor en la fatídica última cita y sorprendió al jurado con algunas de sus creaciones. De la «mediocridad», como le espetaba en ocasiones el chef Jordi Cruz, a «casi brillar». Castaño continúa llevando por bandera su carácter gijonudo y roza llegar al tramo final del talent show más seguido en España.
La noche comenzó movida para los aspirantes. La primera prueba fue una especie de comanda express en la que los tres miembros del jurado y Carlos Latre les pedían a los concursantes diferentes raciones para que las elaborasen en un tiempo muy ajustado. Juanma empezó algo perdido, la verdad. «¿Esto qué es?», preguntaba patata morada en mano. «Si les gusta lo que cocino bien y, si no, también». Se puso manos a la obra con los platos a contrarreloj. Luces y sombres. Los chips de verduras resultaron ser «bastones» y el poke no fue tarea fácil para el gijonés. «¿Cómo se cocina la quinoa?». Fue a más, remontando el partido. Presentó un buen tartar de atún, un bao delicioso, un rico tiramisú… Con vaciladas a Miki Nadal de por medio. Y una advertencia de Jordi: «Juanma… Estamos volviendo a la mediocridad«, le advirtió. Juanma cogió el guante con guasa: «Nos sacamos una foto que hoy es mi último día, ¿vale?».
Sudar en el foso
La realidad es que Juanma volvió a jugar su papel de ‘despistado‘. Y no le salió mal. Fue el segundo mejor valorado en la prueba. Y Miki, el primero. «Vaya mérito ganar la peor prueba de MasterChef», le picó Juanma. Ser el mejor significa, como siempre, la canallada de ser capitán en la prueba por equipos. El gijonés mostró dotes de mando con su equipo, formado por Carmina, Victoria Abril, Verónica Forqué, Iván Sánchez y Terelu Campos. En resumen, su mano derecha (improvisó unas minipizzas para salvar el cocinado) no fue suficiente para que el resultado no fuera un «desastre», según Cruz. Tampoco lo hizo mejor el lado de Miki. La conclusión: delantales negros para los dos equipos. Juanma, al foso junto a Miki y Bustamante, entre otros.
«Has superado la mediocridad, pero aún no estás en la excelencia» @juanmacastano @JordiCruzMas https://t.co/5KB3O2GWnE #MCCelebrity pic.twitter.com/4kyPgVKbW5
— MasterChef (@MasterChef_es) October 18, 2021
La prueba decisiva se dividió en dos partes. La primera, una carrera en la que había que limpiar diferentes productos. Deshuesar, limpiar, desescamar… En su grupo Juanma fue el segundo. David Bustamante le privó de subir a la galería, pero el asturiano tenía un as en la manga. Tocaba preparar un mar y montaña con un coquelet, dorada, espardeñas y huevas de oricio. Su ‘Paraíso Natural’ fue el mejor. «El jugo del pollo está reducido, invade y está presente. El plato está bonito y homogéneo. Hay un cambio en ti. Te veo seguro, contento… No reconozco tu plato. Hemos superado la mediocridad, tampoco en la excelencia. Pero es un contraste… Estás brillando», le halagó Jordi. Un gran plato que le permite seguir una semana más en MasterChef y que le permitió culminar su constante competición con Miki Nadal, con el que guardaba viejas rencillas cuando Nadal tenía su programa en Real Madrid TV. El humorista cayó junto a Terelu en una doble expulsión. A Juanma le dolió su salida. El roce hace el cariño, pero el asturiano ha ganado esta particular y divertida batalla.