La entidad grupista había presentado dos documentos contra el proyecto de renaturalización al no contemplar mantener obligatoriamente el anillo navegable
Nuevo capítulo en el enfrentamiento entre el Ayuntamiento y el Grupo Covadonga por el cierre del anillo navegable del Piles desde 2019. La Junta de Gobierno local ha desestimado los dos recursos que la entidad que preside Antonio Corripio presentó contra las adjudicaciones del contrato que aborda la renaturalización de los ríos Piles y Peñafrancia. La portavoz socialista Marina Pineda ha defendido que «al tratarse de contratos menores, quedan excluidos del proceso de licitación pública y pueden adjudicarse directamente cumpliendo la normativa». «Necesitábamos la valoración de un grupo de expertos muy especializado y entendemos que se han cumplido todos procedimientos legales», ha zanjado. También ha defendido que los acuerdos plenarios se han respetado: «En los estudios encargados se señala la necesidad de buscar soluciones para la práctica del piragüismo y valorar las opciones. Con anillo o sin anillo navegable».
El Grupo Covadonga defiende que la resolución que han recurrido era «nula de pleno derecho» por haberse adjudicado el contrato a la entidad Fundación Conde del Valle Salazar, «cuyas prestaciones contratadas por la administración no se encuentra entre los fines de la fundación», por lo que han contratado a dos profesores con experiencia previa para abordar el estudio. «Se ha querido sustraer de la libre concurrencia ambas licitaciones», critica el Grupo. También recuerda la existencia de dos acuerdos plenarios «contrarios al contrato ahora recurrido».
Vía judicial
Más allá de este último rechazo, el Grupo Covadonga optó hace unos meses por la vía judicial para frenar la eliminación del anillo navegable, vigente desde 2019. La entidad ha recurrido ante el Juzgado de lo Contencioso Administrativo de Gijón las decisiones municipales, según afirman, «adoptadas de forma unilateral, sin el consenso de la ciudadanía y sin criterios técnicos que avalen la decisión del cierre del Anillo Navegable del río Piles sin una alternativa viable, con el consiguiente perjuicio para la práctica del piragüismo». Según la entidad grupista, se han encontrado con una «interesada falta a la verdad de la Concejalía de Medio Ambiente del Ayuntamiento de Gijón, por lo que no ha quedado más remedio que acudir a la vía judicial», y destaca que el proyecto licitado por el consistorio para la redacción del estudio y proyecto de ejecución de las obras de rehabilitación y renaturalización del curso bajo de los ríos Piles y Peñafrancia «no tiene en cuenta las condiciones que se han de dar para la práctica del piragüismo».
De hecho, la adjudicación a la UTE para redactar el proyecto de recuperación del Piles no incluía como obligación mantener el anillo navegable. Según defendió en marzo el Ayuntamiento, mantener el uso para el piragüismo es «incompatible» con la recuperación medioambiental porque el estancamiento de las aguas en ese tramo podría promover la aparición de sustancias tóxicas. Una postura que choca frontalmente con la defendida por el Grupo. “¿Puede haber mayor defensor del Piles y de su naturaleza que el Grupo?”, defendió su presidente Antonio Corripio en una entrevista a este diario.