La directora de LABOral Centro de Arte y Creación Industrial Karin Ohlenschläger, ha defendido el trabajo desarrollado desde este equipamiento en colaboración con la comunidad educativa de la región.
«Si esto no ha llegado, lo siento mucho, hemos hecho lo que hemos podido», ha reconocido Ohlenschläger. «El futuro ya no está en mis manos», ha apuntado con referencia a su cese, en declaraciones a los medios de comunicación antes de presentar uno de estos proyectos en colaboración con la comunidad educativa.
El centro ha estado en las últimas semanas en el centro de la polémica, tras la creación, hace poco más de una semana que de #puxaLABoral, la campaña de apoyo a Laboral Centro de Arte. Artistas, comisarios, gestoras, colectivos y visitantes que desde el año 2007 han tenido algún tipo de relación con LABoral lanzaban una carta abierta dirigida a las administraciones públicas y a la sociedad asturiana.
«Les deseo toda la suerte del mundo para que salga adelante», ha indicado, antes de insistir en que, del trabajo desarrollado en el equipamiento, se queda con este trabajo colaborativo educativo.
Ha incidido, asimismo, en que son un equipo humano muy pequeño, carecen de departamento de comunicación propio y cada uno arrima al hombro para dar a conocer la labor que se desarrolla. Ligado a ello, ha indicado que hay una pubicación del trabajo hecho en los últimos diez años, disponible en la web para descargar en castellano e inglés.
«Hemos intentado comunicar cada paso»
Con todo, ha insistido en que han intentado comunicar cada paso que han dado, a lo que ha apuntado que ahor el reultado está en manos e colegios, institutos y otros centros superiores de estudios.
A este respecto, se ha mostrado convencida de que lo que ellos puedan aportar termina llegando a quien está trabajando en la innovación del sistema educativo, adaptado a los retos del siglo XXI.
Es por ello, que ha resaltado que para ella es un «enorme honor y satisfacción» poder presentar en este día un trabajo fruto de la colaboración de LABoral con la comunidad educativa en Asturias.
Ha explicado, asimismo, que desde hace más de diez años levan colaborando con profesores y alumnos para introducirles en la educación crítica y creativa de las nuevas tecnologías.
Ya en últimos tres años, ha apuntado que se pudo desarrollar un proyecto consistente en la formación del profesorado y que, en trabajo estrecho con un grupo de artistas, se pudo elaborar diez proyectos y crear un laboratorio digital propio.
«Con esto me quedo muy satisfecha, muy ilusionada, porque entre todos hemos puesto unas semillas que estoy segura que van a saber cuidar para que crezca y sirva de inspiración, de ejemplo y de modelo, porque cada uno es distinto e individualizado con función a cada uno de los centros», ha sostenido.
Ohlenschläger ha defendido que el arte y cultura contemporánea pueden contribuir a esa transformación educativa y el uso interdisciplinar de esos laboratorios para que sirvan a quien impacte tanto en humanidades, física o cualquier materia. El profesorado esta bien formado no solo en uso tecnologías sino en otros métodos de aprendizaje y enseñanza, según ella, quien confía en que va a dar resultados.
De hecho, ha destacado que ha habido proyectos nacidos de esta colaboración que han recibido premios tanto nacional como internacional.