La formación infantil y juvenil, que nació en Gijón hace más de dos décadas, compite con las de Llangreu, Ribeseya y Villa y Condáu de Noreña por el galardón dedicado al icónico instrumento asturiano
No cabe duda de que la cultura asturiana, en sus múltiples formas, vive tiempos dulces, de revalorización y popularidad entre propios y foráneos. El interés por la misma, eso sí, no se limita sólo a los más mayores. También niños y adolescentes demuestran una creciente pasión por ella… Y, a veces, con un grado de dedicación que, a la postre, tiene premio. Que se lo digan, si no, a la Banda de Gaitas Infantil (BGI) Magüeta de Gijón, que este año, por primera vez en su ya dilatada historia, compite por alzarse con el Premio AMAS en la categoría de Gaita. Eso sí, será una competición reñida; sus jóvenes músicos deberán medirse con la Banda Gaites Villa y Condáu de Noreña, la de Ribaseya y la del Conceyu Llangreu. Las votaciones ya están abiertas, y puedes realizarse a través de esta web.
Nacida hace más de dos décadas, con la misión principal de forjar una cantera de músicos ligados a las tradiciones asturianas, pero que rejuveneciesen el panorama musical autóctono, la BGI Magüeta lleva en la brecha desde entonces, y se ha convertido en una habitual de los certámenes locales y regionales. Es por ello que la edad de sus integrantes oscila entre los seis y los catorce años. Y, por supuesto, como no podía ser de otro modo tratándose de una agrupación netamente asturiana, las gaitas no están solas; junto a ellas cobran protagonismo los tambores, de uso muy celebrado por el público. Así quedó demostrado el pasado agosto, durante el XXIII Festival Internacional de Bandas de Gaitas ‘Villa de Gijón’, en el transcurso del cual la Magüeta se llevó buena parte de los aplausos y elogios.