El espacio de Instagram fue creado a principios de este mes para dar visibilidad, de forma anónima, a las presuntas víctimas de abuso sexual; sus administradores justifican su decisión por el «peso psicológico» de los mensajes recibidos
Es duro dar voz a un drama de la magnitud de una agresión sexual. Muy duro. Lo es aunque el autor del relato no sea la víctima. Y si, a mayores, esa difusión se convierte en algo no puntual, sino constante, encadenando unos casos con otros, el efecto psicológico es fácil de imaginar… Una presión que los responsables del perfil de Instagram @denunciasasturies aseguran no ser capaces de soportar más. Diez días después de la creación de dicha cuenta, y a sólo tres de que publicasen el presunto abuso sexual perpetrado contra una mujer por el asesor responsable de comunicación y prensa de Izquierda Unida (IU) en el Ayuntamiento de Oviedo, sus administradores han anunciado el cese de la actividad digital, alegando, precisamente, el «tremendo peso» de las comunicaciones recibidas en esta semana y media. Un aluvión de comunicaciones en el que no faltan, afirman, «mensajes de odio«.
En el texto, escueto y muy comentado desde que viese la luz esta misma mañana, sus autores reiteran que «nuestra única intención era dar voz a las víctimas, que pudieran ser escuchadas, pero tenemos una vida, familia, y, psicológicamente, esto nos está superando en tan sólo una semana«. Más aún, las propias víctimas «también se están viendo afectadas, y es lo último que queremos», razón por la que, sentencian, «no podremos publicar más«. Con todo, los responsables del perfil no eluden su gratitud para con todos aquellos que han colaborado en positivo durante este tiempo, sobremanera en aras de reforzar esa cruzada que es la de visibilizar una violencia «que, en muchos casos, es recurrente». Y finalizan animando a presentar las denuncias pertinentes ante la Justicia, si bien, matizan, «en el Centro de Crisis del Principado os dan apoyo psicológico y de cualquier tipo sin haber denunciado«.
La cuenta @denunciasasturies nació como una suerte de homóloga regional de aquellas que gestiona, a escala nacional, la periodista Cristina Fallarás, y por medio de los cuales se hizo público el conocido como ‘caso Errejón‘. De hecho, el modelo empleado para difundir el escándalo ocurrido en las filas de Izquierda Unida fue muy semejante al utilizado por dicha comunicadora para hacer lo propio con el ex diputado de Más Madrid. No obstante, como en el caso de los perfiles de Fallarás, el asturiano ha estado envuelto en ciertas críticas desde el minuto uno, sin que hayan faltado quienes han puesto en duda la veracidad y seguridad de testimonios anónimos que, opinan, podrían llegar a ocultar un engaño. A ese respecto, la misma responsable de Igualdad de Izquierda Unida, Begoña Collado, en declaraciones a miGijón salió ayer en defensa de la labor de @denunciasasturies, necesaria en un contexto en el que «el sistema judicial no da el apoyo necesario a las mujeres».
Agradezcote la difusión d’esta noticia, pero prestaríame matizar que son dos muyeres les que manexaben esti perfil. O sea que lo apropiao ye referise a elles como administradoras, autoras y responsables (non en masculín).
Y por otru llau, y como elles mismen definen, esto vien al rodiu de lo que pasó en @denunciasgranada y los testimonios d’abusos contra unos raperos. Elles nunca nomaron a la periodista.
Pa finar, dicir que non solo fue’l políticu, fálase de músicos, profesores de universidá, conductores d’autobús, too tipu de’homes y de trabayos.