«Si se pierde la Atención Primaria tal y como la conocemos, perdemos todos como sociedad», valora la Federación de Asociaciones Vecinales de Gijón (FAV), que llama a «defenderla» y a «exigir una sanidad pública de calidad, hoy y para el futuro»

«En los últimos meses, hemos constatado que se está permitiendo que médicos sin la especialidad de Medicina Familiar y Comunitaria atiendan en los centros de salud y en los servicios de urgencias», apunta en un comunicado la Federación de Asociaciones Vecinales de Gijón (FAV), que expresa «nuestra profunda preocupación por la situación que atraviesa la Atención Primaria en nuestra comunidad”. Una cuestión que esta semana confirmó la consejera de Salud, Concepción Saaavedra, en Comisión a una pregunta de la diputada popular Pilar Fernández Pardo. En concreto, señaló que es «una medida de carácter excepcional, puntual y subsidiaria, adoptada únicamente en el ámbito de la Atención Primaria y dirigida principalmente a la realización de la atención continuada, cuando no se dispone de facultativos con la especialidad homologada y en situaciones excepcionales ante la falta de personal».
La FAV entiende que «esta medida no sólo supone una falta de respeto hacia los profesionales de Atención Primaria, sino también, y especialmente, hacia los pacientes. La ciudadanía merece ser atendida por profesionales con la formación adecuada, y rebajar los requisitos es un desprecio a ese derecho básico. Además, esta situación genera desconfianza y sensación de abandono entre los usuarios del sistema público». «Permitir que personas con otras especialidades, e incluso sin homologación, puedan atender en consulta, sólo por la falta de médicos, es inaceptable y pone en riesgo la salud de todos», añaden.
De igual forma alerta de que estas contrataciones «tampoco incentivan a los nuevos médicos a elegir esta especialidad. Al ver cómo se devalúa su formación y se rebajan los estándares, cada vez menos profesionales optan por la Medicina Familiar y Comunitaria, lo que agrava aún más el problema y condena a la Atención Primaria a una situación de mayor precariedad y abandono». En ese sentido recuerda que «la Atención Primaria es mucho más que pasar consulta: es atender urgencias, cuidar de pacientes crónicos, abordar problemas sociales y de salud mental, acompañar en cuidados paliativos… Es la puerta de entrada al sistema sanitario y el principal apoyo para muchas personas mayores, familias y colectivos vulnerables. Si se pierde la Atención Primaria tal y como la conocemos, perdemos todos como sociedad».
Por último, los vecinos reclaman «transparencia, respeto y soluciones reales. No podemos aceptar que, por una gestión inadecuada o por falta de inversión, se ponga en riesgo la calidad de la sanidad pública. No se puede modificar la ley según convenga, ni hacer excepciones porque falten médicos. Exigimos medidas estructurales y no parches temporales. La Atención Primaria es el pilar fundamental de nuestro sistema de salud. Si se debilita, lo pagamos todos. Es el momento de defenderla y de exigir una sanidad pública de calidad, hoy y para el futuro».