La Guardia Civil de Gijón investiga a un hombre, que responde a las iniciales A.L.P, de 77 años y vecino de Peñamellera Alta como supuesto autor de un delito de maltrato animal y otro de tenencia ilícita de armas, por disparar a un perro en parque que murió a consecuencia del impacto. Las diligencias han sido entregadas en el Juzgado de Primera Instancia e Instrucción de Llanes.
Los hechos ocurrieron el pasado 6 de julio en la localidad de Oceño, en Peñamellera Alta. A las 19.55 horas, el Centro Operativo de Servicios de la Comandancia de la Guardia Civil de Gijón recibía una llamada en la que se alertaba de que un vecino de la localidad había disparado a un perro, encontrándose este malherido a consecuencia del disparo.
Según pudieron conocer los agentes trasladados al lugar, momentos antes del aviso, mientras un grupo de niños estaban jugando en un parque, esta persona efectuó un disparo al perro de uno de los niños, causándole una herida en un costado. Los propietarios del animal, un Border collie de cinco meses de edad, lo trasladaron inmediatamente a una clínica veterinaria, sin que pudieran hacer nada por salvarle la vida, y donde le extrajeron la bala que le había causado la muerte.
Las investigaciones llevadas a cabo por la Guardia Civil pudieron determinar que esta bala, de calibre 5,5 era coincidente con las utilizadas por una carabina de aire comprimido que el investigado tenía en su domicilio.
A resultas de los hechos, los agentes detectaron que esta persona tenía en su poder dos armas sin documentar, en concreto una carabina de aire comprimido calibre 5,5 (arma con la que supuestamente realizó el disparo) y un revólver antiguo, procediendo a su incautación y depósito en la Intervención de Armas de Cangas de Onís.