Bajo el lema ‘A golpe de tacón, dando tira’, miles de personas participaron en una manifestación en la que no faltaron los homenajes a las fallecidas Anita Sirgo y Maruja Ramos, y al décimo aniversario del ‘Tren de la Libertad’
Asturias, un año más, volvió a teñirse de color morado, el inconfundible color ligado a la causa feminista. Amparadas bajo el lema ‘A golpe de tacón, dando tira’, un homenaje a quienes participaron en la ‘huelgona’ de 1962 en Asturias, miles de personas abarrotaron ayer las calles de Langreo para sumarse a la multitudinaria manifestación de este 8 de marzo, Día Internacional de la Mujer. Y aunque en otras localidades de la región se replicaron concentraciones y marchas, la principal fue la que mejor exhibió el sano músculo de que goza dicha cruzada, cada vez más nutrida por jóvenes y adultos, hombres y mujeres, decididos a que la total igualdad entre ambos sexos, y el fin de cualquier forma de abuso sobre las mujeres, lleguen a ser, y pronto, realidad.
Entre pancartas, cartelones, banderas y botes de humo morado, los manifestates partieron a las siete de la tarde del parque Antonio García Lago de La Felguera, y marcharon hasta el parque Dorado de Sama, punto de finalización del recorrido. La música, los cánticos y las consignas se sucedieron, y gritos como «Escucha, hermana, aquí está tu manada», o «Ni sumisas, ni pasivas, mujeres combativas» fueron coreados en masa. Tampoco faltaron las condenas al ataque perpetrado por Israel contra Gaza, ni las críticas abiertas a la explotación sexual y a la gestación subrogada, además de a la «sobremedicación» que sufren las «mujeres divergentes». Pero, sin duda, los momentos más emotivos se produjeron en el momento de recordar a las históricas combatientes feministas Maruja Ramos y Anita Sirgo, ambas fallecidas a principios de este año.
El propio presidente del Principado, Adrián Barbón, presente en la comitiva, se refirió a estas últimas, como a todas sus compañeras, elogiando su impagable aportación como punto de partida del movimiento actual. «Bell Hooks dijo que necesitamos un feminismo construido a partir de la fuerza del pasado, y aquí está esa fuerza, esa capacidad de crear avances, que tiene una profunda genealogía», afirmó el dirigente autonómico. Su mirada al pasado también se detuvo en el ‘Tren de la Libertad’, del que este año se cumple su primera década, «un tren que no se ha parado, no se para y se parará nunca». A continuación, Barbón parafraseó a la también referente feminista Nuria Varela, rescatando su máxima de que «el feminismo es una vanguardia que tiene nada menos que tres siglos de vida. Pero a cada progreso de los derechos y libertades de las mujeres viene detrás una reacción involucionista y patriarcal. Por eso, animo a las fuerzas parlamentarias a blindar los derechos de la mujeres en la Constitución Española«.
En la intervención de Barbón tampoco faltaron las menciones a los recientes éxitos de la Selección Femenina de Fútbol y del Telecable Hockey Club, cuyas integrantes «son campeonas del mundo en todo; sois nuestras campeonas, nuestro orgullo». Del mismo modo, elogió el rol jugado en sus tres años en servicio por el Centro de Crisis contra la Violencia Sexual, cuyas profesionales, en este tiempo, «han atendido 900 casos, de los que 541 han sido por violencia sexual, y 121, sobre menores», cifras que «me estremecen». Y concluyó sentenciando que su Gobierno seguirá «trabajando por la igualdad real y efectiva, sin caer en el inmovilismo», apoyado en la pretensión de «lograr un gran pacto sobre la igualdad».
Mientras el clamor feminista invadía las calles de Langreo, Gijón experimentaba su propia reivindicación. Tras la concentración realizada en El Parchís a media mañana, el Sindicato de Estudiantes, las plataformas Libres y Combativas y SAT Asturias, la Red de Clase Traballadora y el Colectivo de Trabajadoras celebraban su propia marcha desde El Bibio, igualmente a las siete de la tarde, secundada por cientos de personas, mayoritariamente jóvenes. Su clamor, como ya ocurriese en la movilización vespertina, se centró en la implementación de acciones para frenar el auge del machismo entre los niños y adolescentes, y en la necesidad de fomentar la educación real y plena en igualdad para que tales comportamientos sean desterrados para siempre.